Pedrosa prefiere no rodar

e puso el mono para la foto. Dani Pedrosa terminó tan dolorido al acabar la sesión del pasado sábado que ayer se resintió de su lesión en la mano y prefirió no probar suerte en el mojado trazado jerezano. El piloto de Repsol Honda se mantuvo a cubierto dentro de su motor home, con la compañía de su padre, y tan sólo salió para hacerse la foto oficial del campeonato del mundo de MotoGP. La caída en Malasia está pasando excesiva factura al español, uno de los favoritos en las quinielas. El joven piloto se está perdiendo entrenamientos importantes como los que se están desarrollando estos días en Jerez, algo que podría perjudicarle de cara a la temporada que en apenas un mes comenzará en Qatar. El día de reflexión le ha servido a Pedrosa para descansar y coger fuerzas de cara a la última sesión de pruebas que se va a disputar hoy en el trazado. Sin embargo, la incesante lluvia podría provocar que el español diera el punto y final y marche hasta Qatar, donde los pilotos de MotoGP van a realizar sus segundos entrenamientos oficiales.