McCain vence los recelos más ultras al lograr el respaldo de Romney
El apoyo del mormón sitúa al senador de Arizona a un paso de la nominación republicana
Actualizado: GuardarComo si de un milagro se tratase, John McCain, senador de Arizona y principal candidato republicano a llevarse la nominación de su partido a la Casa Blanca, recibió ayer el empujón necesario para ganarse el deseado apoyo de los conservadores más radicales. Mitt Romney, ex gobernador de Massachussets y ex participante de la enrevesada carrera electoral, decidió respaldar al ex combatiente de Vietnam, algo que podría acabar de golpe y plumazo con las aspiraciones presidenciales de Mike Huckabee, el tercer candidato en discordia.
El ex legislador se decantaba por favorecer a McCain dada la popularidad que el veterano senador está cosechando últimamente. Por supuesto, Romney ha pedido a todos sus delegados para la convención nacional republicana del 1 al 4 de septiembre, que cambien de posición y apoyen al que se perfila como la mejor opción para aplastar a los demócratas en las elecciones del próximo mes de noviembre.
Si el total de los 280 delegados conseguidos por el que fuera gobernador de Massachussets decidieran respaldar a McCain, el senador de Arizona alcanzaría rápidamente los 1.191 delegados necesarios para dejar sin posibilidades a Huckabee.
Cabe recordar que los delegados se deben a los candidatos para los que fueron elegidos y una vez que éstos abandonan el proceso electoral normalmente siguen sus consideraciones aunque se pueden dar otras alternativas.
A día de hoy, John McCain cuenta con un total de 843 delegados frente a los 242 del ex gobernador de Arkansas. Por esta razón, Mitt Romney decidió enterrar definitivamente el hacha de guerra con el senador de Arizona y mostrarle su apoyo incondicional para así evitar que la lucha por nombrar al elegido dentro del Partido Republicano no se prolongue demasiado.
Romney demuestra así sus buenas maneras políticas, después de haber convertido a McCain en su principal rival durante el comienzo de la campaña, cuando ambos luchaban por el favor popular. Sin embargo, tras la aplastante mayoría conseguida por el legislador durante la celebración del Supermartes, el pasado 5 de febrero, Romney optó por retirarse de la batalla a tiempo y con la cabeza alta.
El ex gobernador quiere contribuir así a «asegurar» la nominación de McCain y la «unidad» del Partido Republicano de cara a las elecciones presidenciales de noviembre en contra del Partido Demócrata, según declararon fuentes cercanas al político.
Cuando la noticia sobre el apoyo de Romney saltó a los principales medios de comunicación estadounidenses, McCain se encontraba haciendo campaña en Vermont y Rhode Island, aunque añadió un nuevo viaje para reunirse con Romney en Boston y oficializar codo con codo la formación del nuevo tándem.