El derecho a morir dignamente
El otro día conectado a Internet sé me cruzaron unas imágenes de maltrato animal y la verdad es que me quedé hipnotizado del holocausto asiático y otros maltratos y no sólo en Asia si no también en mataderos, cacerías y fiestas populares, no pude contener las lágrimas al ver como esos pobres animalitos sufrían lo impensable. Los llevaban transportados en jaulas todos juntitos, perros, gatos y mapaches, y cuando llegaban a su destino eran sacrificados de forma cruel, inhumana, dándoles golpes en la cabeza, clavándoles pinchos, hirviéndolos en agua y, por último, y aun con el animal vivo, arrancándoles la piel. Pero aun mi mirada se quedaba perpleja cuando el animal sin patitas y sin piel miraba a la cámara con lágrimas en los ojitos, con su último aliento de vida mientras a los torturadores no les importaba nada el sufrimiento, en ese momento sentí odio, rabia e impotencia hacia el ser humano. Llevo días reflexionando y pensando que mientras los gobernantes se preocupan de ocupar un sitio en el poder, muchísimos seres vivos sufren el más temible y cruel fin a la vida.
Actualizado: GuardarNo hay derecho de que en el año 2008 sigan ocurriendo estos acontecimientos cuando tanto presumimos del avance y el progreso, aún se siguen martirizando a millones de seres vivos en el mundo para un único fin, satisfacer a unos pocos humanos de demanda de pieles y otros usos. Siempre supe que se maltrataba a los animales, pero no hasta el punto de hacerlos sufrir tanto.
No sólo la conciencia sirve para parar esto, si no también los hechos, es por ello por lo que tenemos que apoyar en lo posible a los defensores de los animales para que presionen a los gobiernos para que esta lacra desaparezca de la Tierra. Tengo entendido que la comisión europea va a prohibir el comercio de pieles de perritos y gatitos. Debemos acabar con esta miserable injusticia y en ello va todo lo que sea hacer sufrir a un animal: pieles, caza, festejos, mataderos, abandonos. Ojalá este diario me publique esta carta aunque sólo sea para al menos colaborar con el inicio de un mundo mejor y para a las personas que compran pieles y no saben de donde vienen pedirles que vean esas terroríficas imágenes en Internet. Creo que cualquiera que tenga corazón se tiene que compadecer de ver lo que nuestra especie es capaz de hacer.
Eduardo Villanueva López. Cádiz