Obama ha logrado la victoria en Maryland, Virginia y Washington DC. /REUTERS
primarias en estados unidos

Obama sigue creciendo tras su victoria en el Potomac

El candidato demócrata logra un nuevo triunfo, tras el exitoso fin de semana, y supera en número de delegados a Clinton, mientras que McCain se aleja un poco más de Huckabee en el bando republicano

NUEVA YORK Actualizado: Guardar
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Esta vez las encuestas no fallaron. Barack Obama arrasó anoche en las llamadas 'Primarias del Potomac', en referencia al río que atraviesa la capital federal -Washington DC- y los dos estados que la rodean -Maryland y Virginia-. Era la tercera noche de primarias, casi consecutivas, en las que monopolizaba las victorias de todo lo que estaba en juego, y ha permitido por primera vez al joven senador de color superar en número de delegados a su contendiente.

Hillary Clinton lo sabía. Sus colaboradores se habían encargado de dejar claro que tras el empate del 'supermartes' bien podía pasar todo el mes sin cosechar una sola victoria, por eso convenía jugar a las bajas expectativas con la esperanza de sorprender con algún triunfo. Ayer muchos soñaban con que fuera Virginia, pero ahí también se impuso Obama por un abrumador 64 a 36%. En Maryland, donde el temporal de nieve obligó a retrasar el cierre de las urnas, se le atribuía 62% a 35%. Y en Washington DC, que tiene mayor porcentaje de africanoamericanos, el margen aumentaba hasta un aplastante 76% a 24%, asestando una humillante derrota a la ex primera dama.

Ansiosa de llegar al 4 de marzo, Clinton se saltó ayer Wisconsin, que le augura otra derrota el martes, y estrenó su campaña texana en El Paso. Allí se dio la mano con líderes hispanos, habló de su pasión por los chiles y recurrió a un dicho popular para exaltar a las masas: “Como decís aquí en Texas, Bush es todo sombrero y nada de ganado, pero después de siete años de Bush ¡necesitamos menos sombrero y mucho más ganado!”, vociferó.

McCain, más cerca del triunfo

En el bando republicano el predicador Mike Huckabee se había recorrido todas las iglesias de Virginia en busca del milagro, envalentonado por su inesperadas victorias de Kansas y Louisiana el sábado pasado pero, esta vez, Dios no le sonrió. Los evangelistas votaron por él en masa, y hubo un momento de la noche en el que estuvo por delante de John McCain, que al final se impuso por 50% a 41%. En Maryland repitió la ventaja, 54% a 30%, y en la capital federal le aplastó por 67% a 17%.

La victoria en Virginia tiene un especial significado para McCain, después del pobre resultado que obtuvo hace ocho años frente al entonces aspirante a la Casa Blanca, George W. Bush, quien logró en este estado sellar su candidatura republicana.

Empecinado en seguir adelante, Huckabee rechazó una vez más retirarse de la contienda hasta que alguien tenga los 1.191 delegados que requiere la nominación republicana. Los asesores de McCain advirtieron anoche que incluso si gana alguna batalla más “sólo retrasará lo inevitable”. El senador de Arizona, que se considera ya el nominado del partido, centró anoche sus ataques contra el favorito del momento, criticando la “retórica sin ideas” de Obama, que calificó de “tópico”.

En esta jornada se ha producido una afluencia récord de votantes en estas tres circunscripciones, reflejo de la importancia que estas votaciones tienen, especialmente para los candidatos demócratas.