La motorada del primer fin de semana de febrero congrega a más de 4.000 motos
La muerte de un motorista en un accidente fue el suceso más grave que se registró
Actualizado: GuardarLa motorada del primer fin de semana de febrero congregó en Rota a más de 4.000 motos. El jefe de la Policía Local, José Luis Mesa, destacó en rueda de prensa que en esta edición ha vuelto a crecer el número de participantes y de 630 inscritos el pasado año han pasado a 922, concentrándose en el momento de mayor afluencia más de 4.000 vehículo.
La Policía Local realizó un balance de la actuación del Plan de Seguridad Municipal el pasado viernes de la motorada que tuvo lugar el día 2 y 3 de febrero. En el parte de incidencias de esas jornadas se cerró con un accidente grave donde un motorista perdió la vida tras chocar con otro ciclomotor cuyo conductor sólo sufrió heridas leves.
El resto de incidentes se limitan a dos denuncias por conducción negligente, seis por estacionamientos indebidos, una por alcoholemia, cinco por carencia de casco o bien por no utilizar uno homologado y dos inmovilizaciones de ciclomotores que carecían de seguro.
El dispositivo de seguridad fue diseñado, como en otras ocasiones, por la Junta Local de Seguridad en la que participan los diferentes cuerpos de seguridad del Estado. El objetivo es que las personas que han visitado Rota «se sintieran seguros y disfrutasen de las numerosas alternativas de ocio», manifestó José Luis Mesa.
La Guardia Civil se estableció desde la mañana del sábado controles en los accesos a la localidad y en la zona de pinares para evitar acampadas ilegales. La Policía Nacional se encargó de los tres puntos estáticos de vigilancia en la zona de la avenida San Juan de Puerto Rico, en la Costilla y en el recinto ferial.
En cuanto a la Policía Local se suspendieron todos los permisos y licencias para que la plantilla, prácticamente al completo, participase en los servicios que se repartieron en tres niveles. El primero en el acceso al recinto ferial para controlar la entrada de vehículos; en la zona de las nuevas avenidas, la avenida de la Diputación y Príncipes de España y por último, en el casco antiguo y en la zona de San Juan de Puerto Rico.
Protección Civil con cinco voluntarios, se hizo cargo del camión-cuba, que se ubicó en el recinto ferial, para controlar posibles incendios, así como una ambulancia.
José Luis Mesa comentó que el uso del casco «fue prácticamente del cien por cien de los motoristas».