Jerez

Carta de agradecimiento de Mauricio Geara a la Policía

Cuando escuchamos o leemos, sea por la televisión o por los periódicos, siempre destacan lo negativo de lo ocurrido, lo dramático y lo destructivo; y en poquísimas ocasiones resaltan y ensalzan un trabajo bien hecho o para agradecer una labor perfectamente acabada. Parece que el lado bueno de las cosas no tiene lugar en este mundo tan materialista, ay que no llama la atención al público.

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En esta ocasión, en estas fiestas navideñas pasadas, experimentamos en nuestra carne y hueso un suceso desagradable y gordo, por la sustracción de un maletín, que contenía documentos de poco interés pero con una cantidad muy respetable de dinero destinado a obras benéficas. Dicho maletín se depositó en el suelo de un aparcamiento subterráneo, cuando se pagaba el estacionamiento del vehículo, percatándome momentos más tarde de que se había dejado en dicho lugar, habiendo desaparecido cuando volví a recogerlo.

Acto seguido me presenté en la Comisaría del Cuerpo Nacional de la Policía y formulé la denuncia al Juzgado de Instrucción correspondiente. Pero la verdad sea dicha, no tenía ninguna esperanza de recuperar el maletín, ni por supuesto el dinero que estaba destinado a ayudas benéficas de los Reyes Magos de este año pasado. Pasaron tres días, y cuál fue mi sorpresa cuando me anunciaron que se había recuperado el maletín y el dinero también en su totalidad. Cuando vine a recoger el dinero, me entrevisté con el jefe de la Brigada de Policía Judicial, señor Francisco Álvarez, el cual me comentó en detalle todo el laborioso trabajo de investigación que había sido desarrollado por uno de los Grupos de Investigación de la Comisaría para verificar y estudiar todas las imágenes registradas por las cámaras de seguridad colocadas en los diferentes sitios del parking, así como multitud de otras gestiones que pudieron dar con la recuperación de los sustraído.

Agradecimiento sincero a todos los que han colaborado en resolver este problema espinoso, a los funcionarios del Grupo de Investigación de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía encargados de este asunto en general, a su comisario, don Andrés Garrido, y al inspector Jefe, jefe de la Brigada Local de Policía Judicial, don Francisco Álvarez, en particular por el interés que han mostrado para resolver, de forma tan exquisita y profesional, un problema que afectaba a muchos niños que estaban esperando esos regalos de Navidad. Y como dicen en francés... Chapeau.