Tensión a superar
Actualizado: Guardarl documento hecho público el pasado jueves por la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal, expresando consideraciones pastorales para «el ejercicio responsable del voto», se ha convertido en la referencia central de estas jornadas de precampaña gracias a la réplica en la que han coincidido tanto los principales responsables del PSOE, con el presidente Rodríguez Zapatero a la cabeza, como muchos de sus candidatos provinciales. A tenor de lo manifestado, es evidente que los socialistas han procedido más a juzgar la intencionalidad del citado documento que a valorar su contenido literal. Pero aunque ello haya llevado a alguno de sus dirigentes a tergiversar o realzar en exceso aspectos concretos del texto de los obispos, es lógico pensar que éstos debían ser conscientes de que buena parte de la opinión pública iba a interpretar su mensaje pastoral como una instrucción dirigida a los católicos para no votar a los socialistas. Es en este punto donde parece evidente que el PSOE, lejos de incomodarse por el documento de la Conferencia Episcopal, lo ha convertido en argumento para activar los reflejos más anticlericales de su base electoral y, en general, para cohesionar a sus incondicionales en torno a una concepción estrictamente laicista de la vida pública. La combinación de advertencias dirigidas a los propios obispos --sugiriendo que lo ocurrido invitaría a una revisión de los acuerdos Iglesia-Estado-, que han querido transmitir tanto el presidente Rodríguez Zapatero como la vicepresidenta Fernández de la Vega da buena muestra de la modulada estrategia con la que la dirección socialista ha decidido aprovecharse de la situación.