«Cuando se acostumbran a lo bueno, pasa lo que pasa»

Ángel Oliva se marcha del Arcos «con la cabeza muy alta y con la conciencia bien traquila», dice. El técnico aragonés ha dejado su cargo al ex técnico del Xerez B, José Antonio Luna, y en su marcha le ha acompañado el secretario técnico, Nico Sosa. Oliva se siente víctima de sus propios resultados y también de varias manos negras.

-¿Cómo recordará sus dos temporadas y media en el Arcos?

-Excelentes pero este año los re-sultados no fueron los esperados.

-¿Qué motivos han motivado su salida?

-El ambiente que había no era bueno y la relación con algunos directivos no aconsejaba seguir.

-¿Qué le dice a la afición?

-La afición es lógico que no esté satisfecha con los resultados de este año porque cuando se acostumbran a lo bueno pasa lo que pasa.

-¿Se siente víctima de sí mismo?

-Puede que sí. Está claro que he sido víctima del nivel que hemos dejado estos dos años.

-¿Comprende su marcha?

-No estábamos como otros años pero tampoco en apuros.

-¿Por qué no ha funcionado?

-Siempre he tenido la misma forma de trabajar pero este año los nuevos jugadores, que han sido muchos, no plasmaban en el campo lo que les pedía. Eso afectaba a los compañeros sí entendían lo que debían hacer. A todos ellos, les deseo lo mejor.

-¿Qué piensa hacer ahora?

-Descansar. Sobre todo, mentalmente porque este último año el ambiente estaba muy crispado. Espero estar sin trabajar hasta el final de Liga para luego volver.