Joaquín Morales vuelve a Chapín y descarta una venta inminente del club

No pisaba el Municipal de Chapín desde la derrota del conjunto azulino ante la UD Las Palmas, pero su llegada fue muy diferente a su última salida. Joaquín Morales, máximo mandatario del Xerez, volvía al estadio jerezano y llegaba entre aplausos de los aficionados que presenciaban el choque amistoso del Deportivo y el Metalurg ucraniano. El regreso del nazareno se debía a que «vengo para conocer al chaval que hemos traído del Deportivo de La Coruña, Aythami, a saludar a Viqueira y a todos los jugadores». Sin embargo, el constructor, que llevaba más de dos semanas sin atender a los medios, tuvo que dar muchas explicaciones.

Con su regreso a Chapín surgían las suposiciones sobre su vuelta a la presidencia. Morales lo dejó claro: «No voy a reconsiderar mi marcha de la presidencia. Puedo asegurar que Joaquín Morales no va a ser presidente ya ni de la comunidad de vecinos, ni aunque la afición me lo pida». Y es que el constructor de Dos Hermanas entiende que «no me voy a sentar más en el palco de presidente, y si vengo, lo haré como aficionado, con mi carné, que lo tengo desde hace cuatro años».

La polémica venta

Para empezar, Morales aclaró que de la operación de venta del club «no voy a hablar. Ni hablé antes ni voy a hacerlo ahora porque al final es más de lo mismo, como siempre». El accionista mayoritario del Xerez se siente «tan quemado» con este tema que declaró que «sólo voy a dejar el mundo correr, que todo el mundo saque sus propios conclusiones porque el tiempo da y quita razones».

Y es que el nazareno tiene claro que «voy a seguir aquí calladito, haciéndolo todo por el Xerez y buscando soluciones». El mandatario azulino, que confesó llevar varios días sin hablar con el empresario almeriense Juan Morales, declaró que «entiendo que la venta no va a ser inminente», posiblemente porque «igual, los compradores no son tan arriesgados como yo».

De Juan Morales quiso guardarse su opinión, aunque sí que adelantó que el retraso de la regulación de la ampliación de capital realizada por José María Gil Silgado va a ser explicada por Andrés Hernández, jurista del club.

En cuanto a la publicidad que se le ha dado en los medios de comunicación a la operación de venta de la entidad azulina, Morales no se sorprende, ya que entiende que «siempre ha pasado igual. Desde que han aparecido interesados o tocones siempre se ha radiado demasiado, pero esto es así y no voy a hablar de ese tema. El día que hable será cuando alguien venga por derecho».

Quemado y decepcionado

No sólo se encuentra quemado el propietario del Deportivo, también muy decepcionado: «El fútbol en general me ha decepcionado bastante, pero bueno esto es así. Todo está inventado antes de que yo llegara al Xerez».

Decepcionado por el fútbol se encuentra el de Dos Hermanas, aunque no quiso pronunciarse en cuanto a su relación con el Consistorio jerezano. Muy cauto, Joaquín Morales sólo aclaró que «nadie me ha llamado, últimamente no me llama mucha gente y el día de Las Palmas me llamaron muy pocos. Pero la vida es así y hay que aceptarlo».

Nuevo presidente

Para acabar, Joaquín Morales adelantó que «de aquí a muy poco tiempo habrá un nuevo presidente del Xerez», pero no para esta semana, «sino para la próxima». El elegido saldría de los miembros del consejo de administración, aunque el nazareno reconoce que el nuevo mandatario «no lo tenemos pensado aún y hay que hablarlo».

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