Beam Global tranquiliza a su plantilla por la venta de las antiguas marcas de Domecq

La bodega Beam Global -la antigua Bodegas Domecq- lanzó el pasado viernes un mensaje de tranquilidad a su plantilla ante las posibles repercusiones que podrá tener en esta empresa la venta de las marcas clásicas del catálogo de Domecq, que su actual propietaria, Pernod Ricard, a puesto en el mercado.

Ante la incertidumbre de los más de 200 trabajadores de esta casa, la dirección de Beam Global envió una circular interna en la que les aseguró que la venta de las marcas Domecq «no afectará al empleo» y donde especificaba que los productos que pudieran afectar al proceso de venta «no supondrán más del seis por ciento del volumen anual de la producción» de una bodega que sigue acogiendo las existencias de brandies como Carlos I y de vinos como La Ina, y que también se encarga de su proceso de producción.

Según algunas fuentes sindicales, en esa circular, remitida «a todos y cada uno» de los trabajadores de Beam Global, la multinacional aseguró a sus empleados que se mantendrá la actividad y que ésta se desarrollará igual que en 2007, además de asegurar que respetarán los acuerdos en materia de empleo y que «no habrá ningún problema».

Sin embargo, otras fuentes consultadas por LA VOZ insistieron en que las cifras que maneja la empresa a la hora de lanzar estos mensajes de tranquilidad «no son contrastables, porque a estas alturas ni siquiera está muy claro qué es lo que se vende y qué no» en la operación en la que Pernod Ricard ha recibido por estas marcas ofertas de Osborne, Nueva Rumasa e incluso Grupos Estévez o la misma Beam Global.

Sea como fuere, y a la espera de que culmine esta operación que está ya en su última fase, estas mismas fuentes -parece que ajenas al comité de empresa- apuntaron que el próximo 7 de febrero los responsables de las bodegas podrían mantener una reunión con los representantes sindicales de Beam Global en Jerez para explicarles la operación de venta de las marcas de Domecq. En el marco de este encuentro, también se podría confirmar si son ciertos los rumores que apuntan a que la empresa estadounidense se ha interesado también por la compra del catálogo clásico de la casa jerezana.

Inquietud

Este mensaje de tranquilidad de la dirección de la bodega llega después de que la plantilla de Beam Global mostrara su inquietud por el futuro en el transcurso de una asamblea celebrada la semana pasada. En aquel momento, los trabajadores se mostraron intranquilos por que la salida de estas existencias podría provocar «una disminución de la producción y, por tanto, de los puestos de trabajo que son necesarios en la bodega».

Por eso, los empleados de la antigua Domecq dejaron claro que «no van a permitir que salga ni un litro de vino de la bodega sin que vaya de la mano la garantía de un puesto de trabajo». Y es que a estas alturas ya parece claro que la culminación de esta operación de compra-venta pondrá fin al acuerdo de llenado que existía con Beam Global -que sólo se mantendría unos pocos años más-.

ppacheco@lavozdigital.es