El líder del PP y candidato a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, durante su intervención en la clausura de la Conferencia Sectorial sobre Economía y Empleo organizada por el Partido Popular en Madrid. /EFE
SI GANA EL 9-M

Rajoy se compromete a crear 2,2 millones de empleos y 400.000 plazas de guardería

El presidente del PP acusa al Ejecutivo de vivir de la inercia y de la herencia económica dejada en la anterior legislatura

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El anuncio estrella del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no se ha quedado sin respuesta en la filas populares. La contrapropuesta del líder del PP, Mariano Rajoy, en esta precampaña marcada por los compromisos económicos y fiscales se ha centrado en el empleo. Más en concreto, en la creación de 2,2 millones de puestos de trabajo en cuatro años si se lleva la victoria el 9-M.

Casi al mismo tiempo que Zapatero se comprometía a devolver en junio 400 euros a todos los contribuyentes, el presidente del PP cerraba también con promesas la Conferencia Sectorial sobre Economía y Empleo. Mariano Rajoy ha asegurado que, si vence en las próximas elecciones, el objetivo será conseguir el pleno empleo, crear 2,2 millones de puestos de trabajo, elevar la tasa de actividad femenina hasta el 68% en 2011 y situar la tasa de paro en el 6,5% ese mismo año.

Más empleo y más facilidades para conciliar la vida laboral

Las medidas que pondrá en marcha si llega a darse un Gobierno del PP, según ha anunciado su jefe de filas, pasarían por impulsar reformas para que la economía española crezca hasta el 3,8% en 2011. Ese año, el superávit presupuestario podría situarse, según las cuentas del PP, en el entorno del 3% del PIB.

Además, Rajoy se ha comprometido a crear 400.000 plazas de guardería para conciliar la vida familiar y laboral, y a instaurar una Unidad de Información y Seguimiento de los Precios que elaborará un informe mensual con la evolución de los precios en los distintos sectores.

Rajoy ha señalado que la economía española debe situarse entre las cinco más avanzadas del mundo y ha abogado por colocar la renta per cápita al nivel de los grandes países de la Unión Europea y por que las comunidades autónomas avancen hacia la renta media comunitaria.

A su juicio, el crecimiento económico debe basarse en la estabilidad presupuestaria, en las reformas fiscales, en la liberalización de los mercados, en la internacionalización de las empresas y en el fortalecimiento del tejido productivo, con especial atención a las pymes.

Una política 'transparente'

El presidente del PP también se ha comprometido a aumentar la independencia y transparencia de las Comisiones Nacionales de Competencia, de la Energía, del Mercado de las Telecomunicaciones y del Mercado de Valores y a evitar la politización del Banco de España.

Entre propuesta y propuesta, Rajoy ha introducido reproches al Gobierno; uno de ellos, que "le da miedo hablar del futuro". Tras esta afirmación ha recurrido al refrán "no hay peor ciego que el que no quiere ver", justo un día después de que el ministro de Economía, Pedro Solbes, apareciera en la Conferencia Política del PSOE con un parche en el ojo.

En su opinión, el actual Ejecutivo vive de la inercia y de la herencia económica dejada en la anterior legislatura. Ese periodo del mandato del PP, "en el que se hacían reformas de forma continuada", lo ha comparado con la "inacción" del Gobierno actual.

Los problemas de la economía española están, advertía, en una inflación al alza y muy superior a la de la zona euro, en la mayor pérdida de poder adquisitivo entre 2004 y 2006 y en un incremento de las desigualdades entre los españoles. También ha llamado la atención sobre la pérdida de competitividad, el incremento del déficit exterior, "el más alto de los países desarrollados", y el volumen elevado de la deuda de las familias y de las empresas.

Ante todos esos inconvenientes, Rajoy cree que "un cambio de caras no le vendría nada mal a la economía española, es imprescindible". Además, ha destacado que la bajada de impuestos anunciada por el PP es "la mayor propuesta que se ha hecho en democracia".