COMIDA. No faltaron ni la comida de la tierra ni los mejores caldos para acompañarla.
Jerez

Una convivencia ecológica

Numerosos representantes de la Campiña de Jerez participan en la Convivencia Agrícola celebrada en la finca Parral del Barrosillo

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Pocas cosas hay más placenteras, en ocasiones, que pasar un agradable día en el campo, disfrutando al aire libre de una buena compañía. Y eso precisamente es lo que hicieron el viernes un nutrido grupo de personas con motivo de la conocida como Convivencia Agrícola.

La jornada se desarrolló en torno a un almuerzo en la finca Parral del Barrosillo, dedicada a producción del vino tinto ecológico Rey Habis. Contó con el apoyo del GDR Campiña de Jerez a través de su proyecto Programa de difusión del consumo y la producción ecológica a través de la dinamización de colectivos sociales y el sector de la restauración de la Campiña de Jerez, con financiación de la Dirección General de Agricultura Ecológica de la Consejería de Agricultura y Pesca. Se trata de una vertiente de trabajo ecológico de la estrategia agroalimentaria de la entidad, que también viene trabajando desde hace años en la marca Mercado de Sabores de la Campiña. De hecho, se aprovechó la ocasión para dar información y promocionar esta iniciativa de marca territorial de calidad.

En este almuerzo de Convivencia Agrícola estuvieron presentes casi todas las entidades de la Campiña que trabajan en pro de la difusión, producción, comercialización y consumo derivados de la producción integrada y ecológica: GDR, Asociación Consumo Ecológico de Jerez, Aecovi, representantes del movimiento Slow Food, cooperativas... También asistieron productores, huerteros, colectivos y comercializadores de dicho sector.

La idea de esta jornada era crear un espacio donde las personas asistentes pudieran conocerse entre sí, intercambiar experiencias y propiciar el debate y diálogo para dar cabida a la posibilidad de definir estrategias conjuntas de trabajo. La comida que se sirvió estaba basada, como no podía ser de otra manera, en productos tradicionales de temporada.

Pero, además de conversar sobre el eje central de la cita, los presentes se dejaron llevar por el buen ambiente para disfrutar de una agradable jornada al aire libre y, cómo no, de la buena comida y de los mejores caldos.