VENTA DIRECTA. Esta gran nave podría convertirse en una cámara frigorífica para almacenar productos.
Jerez

El 'cerebro' del regadío

La Comunidad de Regantes del Guadalcacín ultima las obras del edificio del PTA en el que se ubicará la central de telecontrol de su modernizado sistema de riego

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La intención de la Comunidad de Regantes del Guadalcacín es que este verano ya pueda comenzar a funcionar el nuevo y modernizado sistema de riegos, que se comenzó a construir hace cuatro años y que supondrá una absoluta revolución para los agricultores de unas tierras que recorren unas 12.000 hectáreas entre Jerez y Arcos -pasando por al menos siete pedanías-.

Y para que llegado ese momento todo funcione a la perfección será necesario que el centro de telecontrol que coordinará el paso del agua por los miles de kilómetros de canalizaciones y las siete balsas de agua esté en marcha en la que será su sede, el nuevo edificio que la Comunidad está levantando en la parcela que adquirieron en el Parque Tecnológico Agroalimentario (PTA) de Jerez.

Hace seis meses que la empresa Sacyr Vallehermoso, la misma que ha acometido los trabajos de reforma de los riegos, comenzó la construcción de este edificio en los 3.000 metros cuadrados de terreno que adquirieron los regantes y, según el encargado de las obras, Juan Morales, en un mes ya estará listo.

Será entonces cuando uno de los primeros edificios que se ha alzado en el PTA podrá albergar -en el espacio que se ha diseñado específicamente para ello- la sala de telecontrol, «cuya fabricación ya se está ultimando y en la que a través de unas cuatro o seis pantallas, paneles y sistemas de alarma podremos controlar el consumo de agua en cada una de las fincas, recoger toda la información necesaria e incluso detectar posibles averías de los regadíos», explica el presidente de la junta de gobierno de la comunidad, Pablo Ruiz Carmona.

En este edificio estará el cerebro de las 12.000 hectáreas de riego, que no sólo facilitará el trabajo de los técnicos de la Comunidad -ya que sólo dos personas podrán controlar toda esta infraestructura en los paneles-, sino que también dará un vuelco a la actividad de los agricultores, que podrán dar las órdenes de riego, indicando la hora de exacta de comienzo y de fin, a través de su propio teléfono móvil.

«La emisora de señales se instalará seguramente en Gibalbín, y en cada parcela habrá un transmisor que se ha ido colocando a medida que se han realizado las obras de canalización, y que desde hace seis meses están siendo comprobados por media docena de expertos de Sacyr», insiste Ruiz Carmona.

Otras 30 personas más son las que están trabajando desde hace medio año para construir el edificio del PTA, un inmueble en cuya fachada principal se ha instalado una cristalera que tendrá a sus pies una gran maqueta de toda la zona regable del Guadalcacín. «Será como una representación gráfica en la que marcaremos incluso el estado de las reservas en los pantanos», narra el presidente de la junta de gobierno, que también explica que justo a la entrada recibirá al visitante un gran mosaico que representará el mapa de la Comunidad.

Pero esta nueva sede que tendrán los regantes tiene cabida para más proyectos y a la hora de construirla se han tenido en cuenta esas opciones de futuro. Así, como explica Ruiz Carmona durante un recorrido por el solar junto al encargado, «hemos decidido levantar una gran nave en la parte posterior del edificio, y en ella queremos instalar una enorme cámara frigorífica si sale adelante la idea de poner en marcha nuestro propio sistema de venta directa de hortofrutícolas con el que habría un beneficio para el agricultor de un 600% más».

En esa misma línea, sería necesario disponer de «una zona de lavado y de transformación de los productos», y para ello sólo habría que derrumbar uno de los muros de la nave y continuar con la construcción del inmueble porque «está diseñado para que sea fácil realizar próximas ampliaciones».

ppacheco@lavozdigital.es