«Ahora haré el abuelo», dice Prodi
La dimisión del hasta ahora primer ministro, Romano Prodi, y el fin de su Gobierno significarán probablemente su adiós a la política en primera línea. Su criatura soñada, una gran formación de centroizquierda que pueda competir de tú a tú con Forza Italia en busca del bipolarismo, el Partido Demócrata (PD) de Walter Veltroni, ya camina sola, aunque no le haga mucho caso. Prodi dejó ayer claro que no está interesado en meter la cabeza en los juegos tácticos de los próximos días. Él mismo descartó que pueda salir su nombre para guiar un Ejecutivo técnico o de transición. «No puedo ser yo quien dirija un Gabinete para hacer reformas. Si se pierde en el Parlamento, aunque sólo sea por un voto, quiere decir que ese esquema ha perdido. Haré el abuelo».
Actualizado: GuardarHa sido lo más parecido a un adiós que ha dicho nunca. Hasta ahora no se daba por vencido y, dadas las peleas internas del centroizquierda, incluso en el PD, no se descartaba que acabara por encabezar alguna coalición. A la izquierda del PD se está formando lo que, a falta de mejor nombre, se ha dado en llamar con cierta sorna la 'Cosa Rossa' (Cosa roja), la unión de diversas siglas comunistas y los verdes. Están dolidos con Veltroni, defensor convencido del bipolarismo, porque ya ha anunciado que el PD se presentará solo, una opción que deja a los partidos pequeños con el riesgo de diluirse en las urnas.
Muere El Olivo
Es verdad que la caída del Gobierno es culpa de formaciones chaqueteras de centro, los partidos de Mastella y Dini, pero la causa profunda hay que buscarla en la irrupción del PD, que aspira a absorber el voto de la izquierda. Así, con Prodi muere no sólo su Ejecutivo de veinte meses, sino todo un proyecto nacido en 1995, la idea de El Olivo, el objetivo de unir la izquierda radical y la reformista. Capitaneados por Prodi, ganaron a Berlusconi en 1996 y 2006, pero en las dos ocasiones terminaron tirándose los trastos a la cabeza. Con Veltroni parece que se abre una nueva fase. Sin embargo, si al final se vota con el actual sistema electoral, el riesgo de que Berlusconi obtenga una amplia ventaja en el Senado puede empujar a PD y Cosa Rossa a unirse de nuevo.