Un poquito de pudor
Me matan, no los puedo soportar. Los sms que envía la gente a los programas de televisión para que se los publiquen, los comentarios que se hacen por internet en los periódicos, o en los foros, por ejemplo en los de Carnaval. Y no precisamente por los contenidos, que a veces también, sino por una cosa tan básica que, aún a riesgo de parecer una tiquismiquis, o una estirada, me voy a arriesgar a decir: las faltas de ortografía. Ahora, con todo esto del Carnaval, me meto en internet, leo las críticas de las agrupaciones, pero cuando ya llego a los comentarios, flipo con que la gente pueda escribir ciertas cosas, enviarlas, y quedarse tan ancha.
Actualizado: GuardarYo no lo soporto. Me pone enferma un texto sin puntualizar, me sale urticaria cuando veo salvajadas gráficas tipo: «Tu no tiene idea es ke lo ke pasa es ke no han pasao xq el jurado solo pasa a os enchufao ere un mamarracho pepi te kiero». ¿Qué trabajito cuesta, hijo, por favor, poner un puntito, una comita, una mayúscula, una «qu»? Yo no pido una redacción cervantina, pero sí algo legible y digno. Quiero decir, que es necesario un poquito de pudor, un poquito de conciencia de lo que es expresarse correctamente. Una mínima preocupación por hacerse entender, como la que tenían nuestros mayores cuando se esforzaban por tener una caligrafía bonita, cuando te enseñaban un texto para que se lo repasaras por si tenían alguna falta.
Y lo peor de todo esto es que los medios de comunicación, que deberían ser transmisores de cultura, transcriben estas barbaridades sin retocar una sola coma, un solo acento, contribuyendo así a la confusión general, a que nadie vea ya mal que en una pantalla de televisión aparezcan «berdadera varvaridade escrita x un sarbaje y yo no entiendo xq no nominan a fulanito a ber si borvemo a star junto antonio yo te sigo queriendo tu maria...».
