El Falla o internet
Precioso pasodoble de la discordia, Si caminito del Falla, de Juan Carlos Aragón, que hubiera levantado al público en un final apoteósico.
Actualizado:Precioso pasodoble de la discordia, Si caminito del Falla, de Juan Carlos Aragón, que hubiera levantado al público en un final apoteósico. Pero, para mí, desencadenó en un fanatismo desorbitado cuando los espectadores hicieron gala al inicio del mismo de una emoción fuera de tono, no dejando ni escuchar a los que no entraron en el juego de esa mano negra que lo difundió. Por respeto a los autores –que compiten en un concurso donde se pretende que todos tengan las mismas oportunidades–, debieron guardar la compostura; como dice su cuplé, la culpa quizás la tengan los cables que están por todos lados. A partir de ahora, habrá que analizar lo ocurrido mirando quién se beneficia de esto. Puede que haya alguien que se abone al dicho Aquí quien no corre vuela, viendo los efectos que este entramado ha ocasionado y provoque que, al final, todos terminemos escuchando las coplas por internet antes que en el Falla. ¿Estas son Las cosas de Cádiz? ¡No! esto son Las cosas del querer que, como en la película, pueden tener un final trágico.