MEMORIAS DE LA FRONTERA

Cuando Cádiz viaja al soul

Shine A Light es el título del primer disco de Satya Project, una iniciativa musical que surgió hace cuatro años en el Berklee College of Music de Boston, donde el pianista gaditano Juan Galiardo se topó con otro estudiante, Marcos Sainz, un hispanofilipino con el corazón repartido entre Madrid y Manila. Ambos crearon primeramente el grupo Bora pero reunieron ya a parte del núcleo de músicos que ahora les acompaña en este disco extraordinario. Se trata de una grabación cuya base fundamental es el soul, aunque en sus temas conviven el rithm & blues, el jazz, el funk y el spanish tingle que aporta, por ejemplo, la guitarra paisana de Tito Alcedo, en un excelente cameo que ilustra Sarve Shaam, que en sánscrito responde a una plegaria universal no ligada a religión alguna, que apuesta por la paz y en donde también suena la percusión de Lolo El Pájaro y las palmas de Juan Diego Mateos y Keko Baldomero, sin que falte el toque gospel de la vocalista Samantha Nelson.

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El plantel de músicos que figura en los créditos de este álbum incluye las voces y los coros del filipino Thor y Kelli Sae, la guitarra y guitarra rítmica de Mark Whitfield, el saxofón y la flauta de Miguel Gandelman -un músico brasileño que formó filas en el cuarteto de jazz de Juan y que ahora gira con Stevie Gonder-, Darren Barrett -trompeta y fliscorno-, Louis Cato -batería, percusión, bajo, guitarra-, Bernd Voss -bajo, guitarra rítmica-, Aaron Bellamy -bajo-, Alex Gordeev -saxofón-, Marcos Vigio -guitarra-, Manolo Nieto -bajo-, pero también la sección de cuerda de la Filarmónica de Praga. Galiardo se reserva para sí la fender rhodes, el órgano y el sintetizador, que comparte con Marocs Sainz, quien a su vez se hace cargo de las programaciones. Nacido en San Roque, Juan Gómez Galiardo reside actualmente en la capital gaditana, pero su música se ha dado a conocer ya en diferentes países, bajo la fórmula habitual del trío o del cuarteto jazzístico. El disco abre sus puertas con el primer tema que crearon juntos, Stranger here: definirse como extranjero aquí dice mucho de la sensación que ambos percibían en sus primeros días estadounidenses. Quizá por ello tanto la grabación como el equipo hayan sido absolutamente cosmopolitas, en una geografía que lleva desde Cádiz y Sevilla a Nueva York, Boston y Praga.

En las páginas virtuales, ya se define a este disco como la mayor sorpresa del soul-jazz-funk de los últimos tiempos y a años luz de lo que suele hacerse en nuestro país, al menos en esta materia. Acaba de publicarse el CD pero las descargas de MP3 han sido apetitosas. La crítica ya avisa sobre ecos de Incógnito, Toser of Power, Minnie Ripperton, Deniece Williams o Donny Hathaway, Earth Wind & FIRE, RH Factor o el neo-soul de Jill Scout y Erykah Badu, pero sobre todo hay personalidad propia a raudales: ambos figuran como compositores de casi todos los temas, aunque también caben sorpresas entrañables como http://media.putfile.com /PARADISE-44'' \t ''_blank A new paradise, que parte de una canción del grupo Los Tarantos en donde, a finales de los años 60 militaba el padre de Marcos, un instrumental al que luego puso voz y palabras la legendaria Donna Hightower. Otros dos guiños familiares: la canción The sweetest of you, es original de la madre de Marcos, la cantante filipina Charina Zaragoza que grabó dos LPs para el sello Columbia en los 70. Y el trabajo gráfico del CD, que firma el reputado pintor Juan Gómez Macías, el padre de Juan. Satya es un nombre que también procede del sanscrito y que significa algo así como verdad u honestidad. Nada más cierto, al menos en este caso.