Cartas

Los 'socialistos'

En cartas a la directora de La Voz, con fecha del 19/1/08, he tenido la satisfacción de leer Vendedores de mortajas, donde se expone perfectamente la realidad de los que tienen a la política como único medio de vida, no haciéndose referencia a partido político alguno. Estos vendedores de mortajas que hacen de la política su profesión, actividad no reconocida en el SAE para desgracia de ellos, por regla general son trepadores sin escrúpulos y de tal bajeza, que no sólo arremeten contra los de su propia calaña, sino que también persiguen a aquellos profesionales -no políticos-, que según su criterio les esta quitando un cargo publico. Les da igual a estos mediocres que el profesional sea de reconocido prestigio y experiencia; para ellos gestionar no requiere otra ciencia que mandar hacer las actividades a gritos y con malos modos, para ocultar con ello su síndrome de la i, entiéndase: ineptitud, inoperancia, ignorancia, inutilidad, indecisión, inestabilidad, inseguridad, etc., propio de una degenerada educación de flojos, que solo superan a los vagos cuando hay que cobrar una productividad que no han sudado.

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Estos depredadores son los que han conseguido que los valores políticos tengan una cotización extremadamente baja y que vuelvan a surgir el resentimiento y la crispación ciudadana. Me pregunto qué harán en el paro tantos estómagos agradecidos, cuando la UE cierre el grifo en el 2013. Probablemente abandonarán el barco antes del naufragio, como las ratas, o intentaran cambiar de opción política. Estos mercenarios superan a los cubrecamas de los Almacenes Eduardo, que tenían dos caras: estos tienen algunas más y se les ve venir. Cada día que pasa, tienen menos posibilidades de anotarse medallas ajenas y la tendencia, ante tanto inútil con cargo de perfil prefabricado, es que terminen entre ellos a dentelladas para sobrevivir. Hoy en día ya se empieza a ver hasta en los pasillos. Dice un proverbio árabe que el árbol de la paciencia tiene raíces amargas pero frutos muy dulces; espero que la próxima estela de cadáveres políticos sean de socialistos, ya que poseen méritos contraídos para ello; no hay prisa para verlo y es lo que se merecen. De no ser así, parecería que este país es adicto a las normas del Marqués de Sade.

Isidro Cortés Márquez Cádiz