El Príncipe de Asturias, Don Felipe de Borbón, enseña a su primogénita, la infanta Leonor, a montar en bicicleta. /EFE
junto a las infantas leonor y sofía

El lado más familiar de los Príncipes

Don Felipe de Borbón, que alcanza la cuarentena el próximo día 30 de enero, no sólo cumple con un intenso programa de trabajo como heredero al trono, sino que demuestra su lado más tierno como padre

MADRID Actualizado: Guardar
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Las imágenes que reflejan el trabajo habitual del Príncipe de Asturias, que el próximo 30 de enero cumple 40 años, han sido grabadas por la Agencia Efe, junto a escenas familiares con su esposa, Doña Letizia, y sus hijas, las infantas Leonor y Sofía, muchas de ellas en exclusiva.

Jesús Bartolomé y Nacho Martín, cámaras de la agencia, han seguido a Don Felipe durante casi tres meses para obtener un reportaje gráfico en el que se muestran imágenes inéditas de quien será el sucesor de Don Juan Carlos en el trono.

Don Felipe y Doña Letizia enseñan a su primogénita, la infanta Leonor, de poco más de dos años, a montar en bicicleta en los jardines de su residencia y se puede ver que, como cualquier otro padre, el Príncipe sujeta con cuidado el vehículo y atiende los deseos de la pequeña, bajo la atenta mirada de la Princesa, que pasea en sillita a su segunda hija, la infanta Sofía, a punto de cumplir nueve meses.

Las escenas familiares, las más desconocidas hasta ahora, incluyen una sesión de lectura de los Príncipes con Leonor, mientras Sofía se entretiene con un juego de texturas, para "chiquitines" como dice Doña Letizia, palabra que repite su primogénita, que da una vez más muestra de su carácter cuando decide que uno de los cuentos se leerá por la noche y no en ese momento.

La grabación muestra al Príncipe por distintas partes de la geografía española y también en sus viajes al extranjero, que forman parte del trabajo diario del heredero al trono, como las audiencias o las reuniones que mantiene en Madrid. Asimismo, cubre actos oficiales abiertos a todos los medios de comunicación, pero también la intensa preparación que conllevan muchos de ellos, con reuniones privadas y largas horas de despacho en la que no cabe habitualmente cobertura informativa.