La planta de Altadis pasará a manos de la británica Imperial antes de fin de mes
La plantilla se siente inquieta ante una reestructuración de personal que puede implicar el cierre de la factoría
Actualizado: GuardarEl dulzón olor a tabaco de la planta de ligadura de tabaco que impregna la ciudad cuando sopla el levante tendrá acento inglés antes de que acabe el mes de enero. La compañía tabaquera británica Imperial Tobacco informó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores de que el 93,5% del accionariado de Altadis ha aceptado la oferta pública de adquisición (OPA). La compradora señaló que espera que el organismo público anuncie el resultado final de la oferta de compra el próximo viernes. Esto permitirá cumplir la previsión que maneja de formalizar la operación antes del día 31. La multinacional británica ofrece 12.800 millones de euros en metálico por la totalidad de la que hasta ahora era su competidora (a razón de 50 euros por título), así como hacerse cargo de la deuda de 3.400 millones que ésta arrastra, por lo que el montante final de la operación superará los 16.200 millones. Los ingleses condicionaron su oferta a que el 80% del accionariado de Altadis aceptara los 50 euros por acción. Y la legislación española exige que los propietarios del 90% de los valores aprueben la transacción. Cumplidas estas dos condiciones, nada obstaculiza que la operación tenga lugar en los próximos días.
«Estamos inquietos»
El nuevo grupo contará con 42.000 empleados y 65 plantas de producción, de los que 28.000 trabajadores y 30 factorías procederán de la sociedad hispano-francesa. La presidenta del comité de empresa de la fábrica gaditana de labores del tabaco, Carmen Pérez (Autonomía Obrera), expresó ayer la inquietud de la plantilla ante los planes que pueda tener Imperial para las instalaciones de Altadis en la Bahía. Las reestructuraciones de plantilla de los últimos 15 años han mermado la nómina de trabajadores hasta dejarla en 315. Pérez apuntó que este reducido número de empleados hace inviable un nuevo expediente de regulación de empleo y que su realización implicaría el cierre de este punto de producción. Imperial rehusó pronunciarse ayer a este respecto. Sin embargo, hace meses advirtió de que el éxito de esta transacción generaría actividades duplicadas y que esto se traduciría en pérdidas de puestos de trabajo.
Expectativas
Lejos de lo que pudiera haber sido previsible, el ambiente en la factoría no es de desánimo. Así lo explicó un trabajador de la planta, José García, que lleva 34 años en ella. Dijo que ya esperaban que la OPA saliera adelante. Añadió que, aunque no es algo que se desee, es previsible que haya un ERE en 2009 y que en 2010 haya prejubilaciones y se produzca el cierre. La media de edad ronda los 50 años.
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