Peter Hans Kolvenbach, el hasta ahora "Papa negro"./ ARCHIVO
CAMBIO EN LA COMPAÑÍA DE JESÚS

Se despide el 'Papa negro' que recondujo las relaciones con el Vaticano

Los jesuitas han elegido como nuevo Prepósito al español Adolfo Nicolás, de 71 años

ROMA Actualizado: Guardar
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Peter Hans Kolvenbach, el hasta ahora "Papa negro", se hizo cargo de la Compañía de Jesús en 1983 y en estos años ha "reconducido" las relaciones con el Vaticano y pedido a los jesuitas una mayor disciplina a la hora de apoyar documentos públicos polémicos con el magisterio de la Iglesia.

A este holandés que en noviembre cumple 80 años le tocó llevar el timón de la Orden fundada por San Ignacio de Loyola tras el difícil gobierno de su antecesor, el español Pedro Arrupe, que tuvo que sortear algunos de los momentos más difíciles de la Compañía en sus relaciones con los papas Pablo VI, Juan Pablo I y Juan Pablo II.

Arrupe gobernó a la compañía desde 1965 a 1983 y en aquellos años el compromiso social de los jesuitas , sobre todo en Iberoamérica, desató gran preocupación en el Vaticano

Cuestionados por el Vaticano

Pablo VI denunció que miraban con excesivas simpatías a movimientos políticos radicales enemigos de la Iglesia, en referencia al marxismo, Juan Pablo I les pidió que no crearan "confusión y desorientación" entre los fieles y Juan Pablo II dijo que no estaba satisfecho con la Compañía de Jesús.

Arrupe presentó su dimisión al Papa Wojtyla, que la rechazó. En 1981 el jesuita español sufrió una trombosis cerebral que le paralizó medio cuerpo y le dejó sin habla. Juan Pablo II colocó al frente de la Orden al jesuita italiano moderado Paolo Dezza .

En 1983 murió Arrupe y fue elegido como sucesor Kolvenbach, con el objetivo de restaurar la serenidad y encarrilar a la Orden hacia el siglo XXI.

Durante su mandato se celebró la 34 Congregación General (del 5 enero al 22 de marzo de 1995) para adaptar las constituciones al nuevo Código de Derecho Canónico y en la que se analizó la situación de la mujer en la Iglesia y la sociedad, la secularización y la inculturación.

Un holandés entre dos españoles

Kolvenbach nació en Druten, Gelderland, Holanda, el 30 de noviembre de 1928 y su formación juvenil se desarrolló durante la Segunda Guerra Mundial, con el país ocupado por los nazis.

El 7 de septiembre de 1948 ingresó en la Compañía de Jesús y diez años después, fue destinado a Líbano con un grupo de jesuitas holandeses, donde pasó veinte años.

Allí amplió sus conocimientos, estudió lenguas y tradiciones eclesiásticas y litúrgicas de Oriente Próximo y se centró en el rito armenio, que abrazó.

En 1981 Arrupe le llamó a Roma para hacerse cargo del rectorado del Pontificio Instituto Oriental y dos años más tarde fue elegido nuevo "Papa negro", como se conoce a los Prepósitos Generales de los Jesuitas, por su hábito negro y su poder en la Iglesia.

En la misma línea progresista y de apertura que el español Arrupe, Kolvenbach definió las relaciones de la Compañía con el Papa y la jerarquía de la iglesia como de "no sumisión servil, sino espíritu siempre constructivo".

Mandato dialogante

Partidario del ecumenismo, en marzo de 1989, y tras la adhesión de varios jesuitas a la "Declaración de Colonia", firmada por más de 170 teólogos alemanes como contestación a la Santa Sede, el padre Kolvenbach pidió a los jesuitas que no firmaran declaraciones públicas controvertidas.

En el gobierno de la Orden ha mantenido una línea dialogante, buscando soluciones a las situaciones difíciles.

Pese a que el cargo de Prepósito es vitalicio, Kolvenbach solicitó al papa Benedicto XVI su dimisión, y éste le autorizó a retirarse por motivos de edad y convocar la 35 Congregación General de la Compañía, de la que ha salido su sucesor.

Hoy, los jesuitas han elegido como nuevo Prepósito al español Adolfo Nicolás, de 71 años.