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Los vecinos de Jerez Norte recogen más de 300 firmas contra el 'botellódromo'
Los residentes en la zona de Chapín aseguran que «nos manifestaremos si el Ayuntamiento no plantea rápido una solución al problema» Denuncian que los «actos vandálicos» se han multiplicado en la zona
Actualizado: Guardar«Hemos recogido más de 300 firmas sólo en Jerez Norte ya que esta es la urbanización más afectada por la presencia del botellódromo en la avenida de los Chiribitos. La alcaldesa, Pilar Sánchez, se comprometió a cambiar este espacio de ubicación si ocasionaba algún tipo de pérdida en la calidad de vida de los vecinos y esto es un hecho». Así de contundente se mostró ayer el presidente de la asociación de la zona de Chapín, Ángel Magro, quien remitió un escrito a los medios donde solicitaba una reunión «urgente» con la primera edil «para exponerle el problema».
La causa de este contratiempo que está crispando los nervios de decenas de jerezanos es que «parece que no nos escuchan ya que hemos denunciado en numerosas ocasiones los graves incidentes que se producen en la zona del botellódromo y no se toman medidas contundentes. De hecho, tras las entrevistas con varios delegados -Juan Manuel García Bermúdez, Miriam Alconchel e Irene Canca- se ha reforzado la vigilancia un fin de semana, pero al siguiente todo vuelve a ser un caos y no podemos seguir así», se lamentó a este medio el representante vecinal.
De hecho, tras la última reunión con el delegado de Movilidad y Seguridad decidieron implantar en la zona una serie de medidas centradas en «aumentar la vigilancia en este espacio. Así, se acordó posicionar en las avenidas del entorno tres vehículos de la Policía Local -siempre siendo conscientes de que estos coches estaban supeditados a las necesidades de la ciudad-, instalar controles de alcoholemia en la zona, poner cámaras de seguridad, prohibir los coches discotecas y aumentar el control sobre los focos de venta de droga, entre otras. De ellas, muchas no se han llegado a implantar», aseveró Magro.
Asimismo, «las medidas de seguridad dentro del botellódromo son mínimas. Hay vecinos que han llegado a presenciar peleas brutales, atropellos dentro de esta zona, numerosos insultos y todo tipo de actos vandálicos». Además, la situación comienza a ser tan tensa que «ha habido varios enfrentamientos entre vecinos y jóvenes, peleas que no han llegado a más gracias a la intervención de los agentes de la Policía», recalcó el presidente de la asociación.
Por todo ello, tanto desde Chapín como desde Jerez Norte «suplicamos que se busque una solución al problema y que se empiece a trabajar en un nuevo proyecto ya que sabemos que nuestros jóvenes necesitan un espacio. Lo que no estamos dispuesto es a soportar esto de forma indefinida». Para los jerezanos que residen es esta parte de la ciudad es fundamental que se elabore un proyecto donde el botellódromo tenga una nueva ubicación -ellos también aseguran que la zona ideal es la defendida por la delegada del Distrito La Granja-Delicias, Irene Canca: los aledaños de Área Sur- y que conste de «techo, asfalto, zona de aparcamiento, luz suficiente, bancos, aseos... todo lo necesario para que sea un lugar decente ya que el actual da vergüenza. Nuestros jóvenes se han tirado dos fines de semana sin aseos y sin luz y ni siquiera el Ayuntamiento conocía este problema».
A pesar de todo lo expuesto, «tenemos confianza en este equipo de Gobierno y esperamos un poco más. No obstante, si la situación se alarga más de lo debido no dudaremos en manifestarnos y tomar las medidas necesarias. De hecho, ya hay colectivos que se han puesto en contacto con nosotros para denunciar de forma conjunta esta situación en los juzgados. De momento, acudiremos al Defensor del Ciudadano y al Defensor del Pueblo Andaluz para que ellos den los pasos que estimen necesarios», apostilló Ángel Magro.
Mientras tanto estas asociaciones aguardan a que se convoque la Mesa para la Convivencia «donde pondremos de manifiesto lo que ocurre. El Ayuntamiento debe ayudarnos y no fomentar un ocio destructivo como el del botellódromo».