Sin impunidad
Actualizado:a comparecencia ayer de Jaime Jiménez Arbe, El Solitario, ante los juzgados de Tudela constituye el lógico desenlace para las correrías de un peligroso delincuente, al que se imputa el asesinato en Castejón de los guardias civiles Palmero Benítez y Vidal Fernández. La formalización ante los tribunales de las acusaciones contra Jiménez comienza a cerrar el cerco que se inició con su detención, después de lograra eludir la acción policial y judicial a lo largo de cuatro años de impunidad. El estrambótico comportamiento desplegado por El Solitario en el momento de su arresto no puede conllevar ningún tipo de fascinación que minusvalore las graves consecuencias de su actividad delictiva. Al tiempo que la aplicación rigurosa de la ley permitirá resarcir a los familiares de sus dos jóvenes víctimas.