El buque Don Inda parte al rescate del pesquero que naufragó ayer en La Coruña
Las malas condiciones del mar impiden por el momento utilizar el resto de los medios del dispositivo de búsqueda
SANTIAGO DE COMPOSTELAActualizado:El buque de salvamento Don Inda, de 80 metros de eslora, y el helicóptero Helimer Galicia han reanudado a primera hora de esta mañana las labores de rescate en la zona del hundimiento del pesquero Cordero, que se saldó en la madrugada de ayer con tres supervivientes, un fallecido y cuatro desaparecidos.
El director xeral de Recursos Mariños de la Consellería de Pesca, Antonio García Elorriaga, no ha descartado que alguno de los marineros desaparecidos pueda estar en el interior del buque hundido, que se encuentra a 320 metros de profundidad en el lugar del siniestro, a 20 millas del Cabo Prior.
En cuanto a los supervivientes, el patrón de pesca del buque, Marcos Ures, continúa ingresado en la UCI del hospital Juan Canalejo de A Coruña, aunque "evoluciona favorablemente", mientras que los dos marineros rescatados con vida, José Manuel Parada Argibay y Hendra Hermawan, serán dados hoy de alta.
Todavía persiste el temporal en las aguas gallegas donde se produjo el naufragio, con vientos de fuerza 8 a 9 (de 75 a 88 kilómetros/hora) y olas de unos seis a nueve metros, según las predicciones que maneja el Centro de Coordinación de Salvamento Marítimo de Fisterra.
Por ello, a la zona del naufragio sólo se ha desplazado por el momento el Don Inda y el helicóptero, aunque Salvamento Marítimo ha confirmado que el resto de equipos están preparados para sumarse al dispositivo una vez que mejoren las condiciones meteorológicas, algo que puede producirse a partir del mediodía.
La nula visibilidad, posible causa de la tragedia
Los cuatro desaparecidos en el naufragio del Cordero son dos gallegos, Alberto Otero González y José Alfonso Sotelo, y otros dos de nacionalidad indonesia.
El arrastrero Cordero, con puerto base en Ribeira (A Coruña), se encontró sobre las 2.45 horas de ayer con un temporal con vientos de más de 90 kilómetro por hora, olas de entre nueve y diez metros y visibilidad prácticamente nula. No obstante, por el momento no se han determinado las causas exactas del suceso.