
David Vidal recupera varios efectivos para el encuentro ante los xerecistas
Miguel Ángel López y Ariel 'Chino' Luna podrían entrar en la convocatorias, pues tendrán el alta médica esta semana
Actualizado: GuardarDavid Vidal, técnico del Elche, podría recuperar efectivos para el próximo compromiso liguero contra el Xerez, ya que Miguel Ángel López Cedrón y Ariel Chino Luna tendrán a lo largo de esta semana el alta médica.
Incluso el primero de ellos, que estuvo a punto de entrar en la convocatoria para el derbi provincial contra el Hércules, podría regresar al equipo en el próximo compromiso.
Igualmente, el entrenador gallego recuperará a Raúl Martín, que arrastraba una tendinitis en el aductor medio del muslo derecho, por lo que se le «reservó» la pasada jornada para evitar que la lesión fuera a más.
Así las cosas, Vidal podría contar sólo con tres bajas para el partido que cerrará la primera vuelta de la Liga: Fernando Niño, con un esguince en el tobillo izquierdo; Alberto Ruiz, con molestias en la rodilla derecha, y Óscar Díaz, que evoluciona favorablemente de la operación en el quinto metatarsiano del pie izquierdo.
Tras la jornada de descanso del lunes, el Elche regresó ayer a los entrenamientos para preparar el último partido de la primera vuelta del campeonato, contra el Xerez, en el Martínez Valero.
Este será el primero de los dos partidos que, consecutivamente, deberán disputar los ilicitanos como locales, ya que el primer encuentro de la segunda vuelta también se disputará, contra el Albacete, en el estadio ilicitano.
Buen regalo
Vidal celebró a lo grande su primer cumpleaños en el banquillo franjiverde. Y el mejor regalo que pudo hacerse a sí mismo fue conseguir la victoria en el derbi ante el Hércules y en el Rico Pérez. El técnico gallego mantiene la llama encendida del sueño de dejar a los franjiverdes en Primera División. Y cumplido casi ya el primer tercio de la Liga, el objetivo está medio conseguido, después de hacerse con las riendas deportivas de un Elche que la pasada temporada necesitaba de un salvador para permanecer en la categoría.
Vidal, que no era la primera opción para el banquillo franjiverde tras la destitución de Luis García Plaza, aterrizó con su coche el 12 de enero de 2007. Llegó, entrenó y al día siguiente conseguía estrenarse con victoria en Castellón, y a continuación ante el Hércules en el Martínez Valero. Sin lugar a dudas, ese buen comienzo permitió el asentar las bases para un futuro inmediato que pasa ineludiblemente por dar guerra hasta el final de la Liga por optar a una de las tres plazas que dan derecho a estar la próxima temporada en Primera.
Durante este año tan intenso como entrenador del conjunto franjiverde, el Elche ha sumado un total de 71 puntos, 39 la pasada temporada por los 32 que acumula en la actualidad en su casillero. Unos números brillantes que permitieron a los franjiverdes en la temporada pasada salvar la categoría y acabar en el undécimo puesto gracias a los 12 triunfos que se consiguieron, mientras que este año acumula otros diez.
Su carácter, su particular visión del fútbol y los métodos de trabajo han calado tanto en la afición como en el propio vestuario. Vidal ejerce de líder, asume la presión pero reparte los méritos entre unos jugadores a los que alecciona, motiva y les saca el máximo partido en cada entrenamiento. Vive por y para el fútbol las 24 horas del día, y todo lo que rodea su faceta deportiva. Atrás quedan la polémica mantenida con Mario Barrera, ex director deportivo, y el reciente lance con la pelea entre Carlos Bellvís e Iván Amaya, en el primer acto de indisciplina que vive el vestuario del Elche desde que se hiciera con los mandos de la nave.
Todo pese a tener que contar con una de las plantillas de menor presupuesto de los últimos años y con algunas carencias, sobre todo en el ataque. Vidal se ha sabido sobreponer a cualquier circunstancia. Y cumplir la máxima de sacar el máximo provecho a las mimbres que desde la comisión deportiva se le han puesto.
«Tengo una plantilla muy igualada. Esta Segunda División es una categoría de obreros y nosotros tenemos un bloque generoso siempre en el esfuerzo, en la entrega, ya que de calidad tengo jugadores muy parecidos», reconoce el mister.
Anima a la afición
Tampoco se descuida a la hora de mimar y arengar a la afición. Todavía no ha conseguido el objetivo de meter 25.000 espectadores en el Martínez Valero, pero de seguir así las cosas verá hecho realidad este objetivo. «Eso algún día se dará. Ahora, más que nunca después de la alegría por la victoria ante el Hércules, espero que la gente se anime y vaya en mucho más número al Martínez Valero. Algunos parece que todavía no creen en nosotros, pero seguimos ahí», dijo.
Ahora, lejos de caer en euforias desmedidas, una situación que sabe controlar a la perfección, Vidal se aferra al «partido a partido» y a pensar «única y exclusivamente en el partido ante el Xerez», actual colista de la Segunda División.