Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
Ciudadanos

«Mi marido se la encontró con un cuchillo y unas tijeras en las manos»

Algunos vecinos de la urbanización San Rafael de la calle Descalzas acudieron a la llamada de auxilio de Caridad el pasado miércoles, cuando gritaba que había encontrado a su esposo muerto en la bañera tras suidarse cortándose las venas. Ayer supieron que sobre esta mujer había sido detenida. «No la queremos aquí. Esto era un barrio tranquilo y alegre y ahora estamos todos con el susto en el cuerpo», afirma Pepi, una de las residentes en la urbanización donde también vivía el matrimonio. «Aunque no nos creíamos que Manolo hubiera sido capaz de suicidarse, no nos imaginábamos que ella estuviera involucrada».

PAULA ALÁEZ
Actualizado:

Y es que, según afirman varios residentes, desde un principio la muerte de Manuel Gil Palacios estuvo rodeada de interrogantes. De hecho, algunos vecinos de viviendas contiguas al número 16 donde residía la pareja confirmaron ayer que, media hora antes de que Caridad gritara solicitando auxilio, «se oía una voz muy débil que parecía un hombre pidiendo socorro, pero nadie hizo demasiado caso».

La detenida afirmó en su declaración que encontró muerto a su marido tras ir a comprar pan y acudir a la llamada de una vecina. «Pero esa vecina dice que nunca la llamó, por lo que está citada para ir a declarar el próximo día 17 (mañana para el lector), para esclarecer un poco lo ocurrido», comenta otro vecino.

«Mi marido entró en la casa y se la encontró con un cuchillo y unas tijeras en las manos», añade otra vecina que no desea revelar su identidad. «El pobre Manolo estaba muerto en una bañera llena de sangre pero sin una gota de agua, lo que nos pareció muy raro si supuestamente se estaba bañando, y ella estaba muy nerviosa, incluso pidió una pastilla para tranquilizarse».

Un matrimonio normal

Pese a todas las incongruencias de este caso, los vecinos afirman que Manuel y Caridad eran un matrimonio normal, al que no se les escuchaba discutir. «Ella tenía un carácter algo raro y conflictivo. Muchas veces parecía que actuaba delante de la gente y ya había tenido problemas con algunos vecinos», explica un vecino.

Actualmente, Caridad ha abandonado su domicilio, precintado por la Policía, y se ha trasladado a la vivienda de un familiar.