Un cásting que surgió de repente
Sólo hicieron falta unas pocas horas para que Miguel decidiera presentarse al último casting del programa Fama, de Cuatro. «Llegó a las siete de la tarde diciendo que se iba a Madrid al casting», recuerda su madre, Ángeles Romero. «Le dijeron que el perfil que estaban buscando era el suyo y no lo pensó más. Me pidió el dinero porque aún no había cobrado el mes y al día siguiente fue a Sevilla a coger el AVE», cuenta.
Actualizado: GuardarDicen sus familiares que él ya sabía que se estaban haciendo pruebas, pero, como estaba trabajando en una empresa de servicios, no se le ocurrió probar suerte. Quedarse en el paro fue lo que le impulsó a hacerlo. Lo que no se imaginaban es que Miguel volvería a su casa de La Granja con el billete de avión de nuevo hacia Madrid porque había sido seleccionado para participar en el programa.