Por ahora, sin exclusividad
Actualizado: Guardarorenzo Sacaluga, de momento, no quiere oír hablar de exclusividad. Quiere mantener su trabajo ordinario con el juzgado que tiene encomendado y compatibilizar las investigaciones sobre asuntos de su especialización con otro tipo de causas. Otra cosa será, como reconoce, que el volumen de diligencias que tenga que llevar le aboque a una exclusividad forzada. Mientras, prefiere no abandonar sus obligaciones diarias: «Yo soy fiscal antes que fiscal de delitos económicos. A mí me gusta la relación con el día a día. Obtener información de diferentes asuntos porque en este puesto puedo estar sólo temporalmente y si te desvinculas por completo por una especialización, después es más complicado ponerse al día».