El Athletic toma aire con una importante victoria ante un Sevilla desdibujado
El Athletic se impuso en San San Mamés al Sevilla por 2-0, justo premio al que fue su mejor partido de la temporada en casa, donde sólo ha sumado en lo que va de curso dos victorias.
Actualizado: GuardarEl partido comenzó como acostumbraba antaño el Athletic en San Mamés, es decir, metiendo la directa desde el principio. No escatimaron esfuerzos los locales, que a base de intensidad, concentración y presión mantuvieron al Sevilla en su campo. Además, la chispa de Susaeta les permitió encontrar una primera vía de hacer peligro por la derecha, por donde llegó la primera ocasión clara del partido (min.10). La creó el canterano rojiblanco, que, no obstante, no pudo superar la buena salida de Sanctis, que le tapó casi todos los huecos. Cuando empezaba a declinar la enorme presión local se estiró el Sevilla, que también contó con su opción, una ocasión casi calcada al Athletic (min.18). En esa oportunidad, fue Iraizoz el que respondió con eficacia ante Navas. Igualándose el choque, aunque siempre con el Athletic intentando llevar la iniciativa, llegó el primer gol del partido. Fue en una jugada por la izquierda del ataque local nacida en Koikili, bien continuada por David López con un pase perfecto a la carrera de Yeste, que definió con solvencia ante De Sanctis. Un par de intentos más rojiblancos, de Susaeta y Aduriz, en jugada de Iraola, dieron paso al descanso.
El segundo tiempo empezó con varios líos, casi siempre con Aduriz por medio, y ya para el minuto 52 el Sevilla se quedó con uno menos. Escudé sacó demasiado el codo y dejó la cara del ariete donostiarra como un cromo. n. Con uno más y el marcador a favor, el Athletic gestionó la ventaja mejor que en otras ocasiones. No se puso nervioso, supo mantener la pelota y, sobre todo, se mantuvo atento al potencial del Sevilla. En esa dinámica, no tuvo problemas en llegar un par de veces con peligro hasta la meta visitante. En la primera, Aduriz casi colocó entre los tres palos un disparo raso cruzadísimo y, en la segunda, Susaeta aprovechó un balón suelto en el área para sentenciar el resultado.