Bonald y su «amigo del alma»
Actualizado: Guardarmigo personal de Ángel González y compañero de la generación del 50, el poeta gaditano José Manuel Caballero Bonald, un «poco aturdido», según sus propias palabras, quiso ayer recordar al poeta asturiano, fallecido, como a su «amigo del alma». «Ahora me importa él, su obra la recordaré otro día», dijo el Premio Nacional de las Letras Españolas en la puerta del tanatorio de San Isidro, en donde acompaña desde esta mañana a la viuda del poeta, Susana Rivera, a la que dejó unos momentos a petición de los periodistas para hacer unas breves declaraciones. «Ángel era el compañero de toda mi vida literaria, desde mi primer libro y su primer libro; era mi amigo del alma», declaró. Caballero Bonald, último representante de la conocida como generación del 50 junto a Francisco Brines, que también se acercó al tanatorio, explicó que lo que quería recordar ahora eran «detalles como aquellas noches largas» que pasaron «juntos, tomando copas y buscando el último bar de la madrugada».