Kilos de pruebas contra ANV
La ilegalización de dos fuerzas políticas con presencia en el parlamento vasco, PCTV y ANV, dependería de que sus presuntas vinculaciones con ETA, a través de sus vinculaciones presuntas con Batasuna, adquirieran el valor de prueba. Existe la certeza moral generalizada de que ambos partidos se encuentran de algún modo en el espacio tentacular de la banda, pero ante los jueces, como es preceptivo en toda democracia, las certezas morales deben ser probadas fehacientemente.
Actualizado:Las pruebas no aumentan, por otra parte, su vigor persuasivo por el mero hecho de ser expuestas en una acumulación de folios argumentales. Pero en los muchísimos folios, y en las cajas con movimientos de cuentas bancarias de las dos organizaciones investigadas, que la Guardia Civil ha enviado a la Fiscalía del Tribunal Supremo, habría datos suficientes para iniciar un proceso de ilegalización, que tal vez no sería tan rápido como para que PCTV y ANV se vieran ilegalizadas antes de las elecciones del 9-M.
Empujado por ese entusiasmo con que el PP anticipa siempre que sus iniciativas antiterroristas llevan garantizado el visto bueno de los tribunales de Justicia, los portavoces y dirigentes «populares» llevan mucho tiempo exigiendo al Gobierno que dé el pistoletazo de salido a la ilegalización de ANV. Y ayer mismo fracasó el PP en una proposición parlamentaria no de ley para que el Congreso impulsara inmediatamente la ilegalización de los dos partidos filoetarras.
Al mismo tiempo llegaban a la Fiscalía del Tribunal Supremo, remitidos por la Guardia Civil, tantos folios y cajas repletas de informaciones bancarias y fiscales sobre ANV y PCTV que difícilmente podría considerarse que los paquetes sólo guardaban sospechas y convencimientos personales. Parece que se ha dado con pruebas sólidas sobre la relación de ANV con Batasuna sobre operatividad económica y política.
Pero si el proceso de ilegalización tiene sus tiempos, que no pueden acortarse a capricho, el de suspensión de actividades se desarrolla por un procedimiento más flexible, en el que se contemplarían incluso decisiones cautelares.
A la Audiencia Nacional, donde el juez Garzón llevaba meses esperando las pruebas que venía buscando la Guardia Civil, ha llegado también documentación abundante de la Benemérita sobre la relación de ANV con Batasuna.
Y Garzón podría iniciar en cualquier momento el proceso de suspensión de actividades del PCTV y ANV. Se recuerda que Batasuna se vio suspendida de actividades antes de verse ilegalizada.
Parece, así, muy probable que en las listas competidoras en las elecciones del 9-n falten los dos fuerzas vascas filoetarras. Lo cual ni significa que el mundo radical abertzale no intentase mediante agrupaciones ciudadanas independientes (supuestamente) presentar sus listas en el mayor número posible de localidades. Y entonces se verían nuevamente obligada la autoridades electorales a estudiar una por una esas listas para detectar cualquier contaminación batasuna o etarra.