Marion Jones, condenada a prisión por mentir a la Justicia
La ex velocista estadounidense Marion Jones, quien confesó haber consumido esteroides antes de participar en los Juegos Olímpicos de Sidney 2000, donde ganó cinco medallas, fue condenada ayer por la justicia de su país a seis meses de prisión.
Actualizado:El juez federal Kenneth Karas le aplicó, además, una pena de 400 horas de servicios a la sociedad, que deberá brindar «educando a jóvenes atletas».
Karas precisó que con su decisión había castigado el hecho de que la atleta mintiera a la justicia y no la trampa deportiva, que no le correspondía juzgar.
«Sí, cometí errores mintiendo a los investigadores», dijo Jones al juez, antes de romper a llorar al implorarle que no la separe de sus dos hijos, «ni siquiera por un corto periodo de tiempo». Sin embargo, Karas destacó que los atletas del nivel de Jones «tienen un estatus particular ya que son considerados como modelos» por la sociedad. Los abogados que defendieron a Jones, que se declaró culpable, habían pedido al juez evitarle una pena de cárcel, mientras que los fiscales se conformaban con un máximo de seis meses.
Ocultar evidencias
La corredora, igualmente, trató de ocultar evidencias de su participación en un esquema de fraude bancario planeado por su ex pareja, el velocista Tim Montgomery, también sancionado por dopaje. Montgomery, con quien Jones tiene un hijo nacido en el 2003, fue despojado de su récord mundial de los 100 metros y sancionado de por vida
Reconocida como una de las grandes atletas del mundo, Jones ganó millones de dólares en contratos publicitarios y apareció en las portadas de importantes publicaciones como Sports Illustrated, Time y Vogue. Algunos expertos consideran que la velocista era tan capaz que podría haber conquistado las mismas medallas sin doparse.