La oposición usa la inflación para desgastar a Solbes a dos meses de las elecciones

Pedro Solbes se mantuvo ayer firme en su postura: el Gobierno no tomará medidas de choque contra la inflación. El ministro de economía no dio ni un paso atrás en su argumento de que ha dejado a España bien preparada para hacer frente a las vacas flacas, en caso de que lleguen. Acuciado en el Congreso por todos los grupos parlamentarios, a excepción del socialista, reafirmó que la subida de precios es sólo temporal y que la desaceleración económica que se avecina ha cogido al Ejecutivo con los deberes hechos.

«Estamos en la mejor de las situaciones posibles para hacer frente a los nuevos elementos», aseveró. El vicepresidente segundo se ha convertido estos días en el gran enemigo a batir del PP. Rodríguez Zapatero le rogó que permaneciera en el cargo, si gana las elecciones, persuadido de que sólo él podía transmitir la tranquilidad y confianza que la situación económica precisa. Ahora, la estadística -2007 acabó con un 4,3 % de inflación y un aumento del paro del 5,27%- ha proporcionado al PP datos poderosos para alimentar su campaña y erosionar la imagen de Solbes.

A apenas dos meses de las elecciones, el resto de las fuerzas parlamentarias se sumaron a la exigencia de medidas para paliar los efectos de estas tasas en la economía familiar.

Solbes aseguró que se preocupa por el bolsillo de los españoles, pero rechazó que haya motivo para la intranquilidad porque «no hay crisis» y porque «si la hubiera -dijo-, la gestionaremos». En todo caso, subrayó que el crecimiento económico en el último trimestre del año llegó al 3,5% y que en 2008 llegará hasta el 3,1%, es decir, similar al de 2004 «Paradójicamente, el 3% de crecimiento que hace cuatro años era parte fundamental de una herencia económica inmejorable, hoy es motivo de alarma y de interpretaciones catastrofistas», ironizó.El portavoz económico del PP, Vicente Martínez Pujalte, aprovechó la ocasión para apretar las tuercas al vicepresidente económico. Le acusó de permanecer de brazos cruzados mientras «las familias lo están pasando mal» y dijo que le falta «carácter y mando para gestionar la crisis». «¿Qué hay familias con dificultados? -respondió Solbes-. Sin duda alguna, también las hay que no las tienen», dijo. «Pásese usted por los bares de Madrid, de Barcelona, o vaya a cualquier centro comercial, el que prefiera, y vea las colas que se han producido durante todo este periodo para comprar cosas», insistió.