Indemnizan con 60.000 euros a la familia de un fallecido por una negligencia médica
«Trataron a mi marido de ansiedad cuando tenía un infarto», asegura la viuda
Actualizado: GuardarInmaculada Brea y sus dos hijas recibirán 60.000 euros de indemnización tras la muerte de su marido por una negligencia médica hace casi un año, después de que éste acudiera a dos centros de salud de Chiclana (uno público y otro privado), aquejado de un infarto de miocardio, que no se le trató de forma adecuada.
El caso se remonta al 15 de enero del pasado 2007, cuando Agustín Sigüenza acudió acompañado por un compañero de trabajo al Servicio de Urgencias del Centro de Especialidades que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) tiene en La Longuera. «Después de que una celadora les dijera que la atención de las urgencias no había empezado aún decidieron ir al Centro Médico», recordó ayer su esposa.
Isabel lamenta, sobre todo, lo que sucedió a continuación. «Ya en el Centro Médico lo único que hicieron fue tratarlo de un ataque de ansiedad, cuando lo que tenía mi marido era un infarto», aseguró la mujer.
De hecho, en el procedimiento judicial abierto por la reclamación de la familia, que ha contado con la mediación de la Asociación el Defensor del Paciente, queda constancia de que «no se dio el tratamiento adecuado al fuerte dolor en el pecho, la sensación de hormigueo en el brazo izquierdo, la sudoración profusa y la sensación de boca seca y pastosa, que constituyen la sintomatología propia de un infarto de miocardio, que tenía el paciente».
Ese mismo juicio quedará ahora suspendido, según el abogado de la familia, José Luis Ortiz, tras pactarse entre las partes antes de que se dictara sentencia la indemnización de esos 60.000 euros. «Dentro de lo que cabe estamos satisfechos con el acuerdo al que hemos llegado puesto que ese dinero permitirá mejorar nuestra situación económica, que desde la muerte de mi marido no era muy buena», aseguraba ayer la viuda.
Ella quiso dejar patente además su intención «de que este tipo de casos se conozcan públicamente y no caigan en saco roto para que no vuelvan a ocurrir nunca más».
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