EUFÓRICOS. El equipo catalán celebra su título en el podio. / ANTONIO VÁZQUEZ
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Prenafeta deja su impronta en la Villa

El veterano colocador del FC Barcelona guió a su equipo hacia la victoria en un partido lleno de alternativas ante Vigo

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El FC Barcelona se convirtió en el primer campeón de la Copa Príncipe de Asturias. El equipo catalán se impuso por 3-2 al Vigo Valery Karpin en la final del torneo que se ha celebrado en la localidad gaditana de Puerto Real, en un partido con constantes alternativas y que se decidió en un ajustado tie-break, marcado por la mayor consistencia blaugrana y la genial dirección del MVP del torneo, Cosme Prenafeta.

Los catalanes pusieron todo su potencial en juego en el primer set y sometieron a unos vigueses que no pudieron reaccionar ante la avalancha de juego rival. Llegó el primer tiempo técnico, y el Vigo Valery Karpin había anotado tan sólo 2 puntos (8-2), muestra de la superioridad de los de Pedro Lanero en el primer periodo.

El FC Barcelona mantuvo un excelente porcentaje de acierto en ataque a lo largo de todo el set, lo que sumado al buen planteamiento de bloqueo sobre los atacantes rivales explica la increíble paliza que los catalanes endosaron al Vigo Valery Karpin en el parcial inicial (25-12).

Quizás este triunfo parcial tan contundente afectó a los catalanes, que pecaron de una cierta relajación en el segundo set. El Vigo Valery Karpin se aprovechó de esta circunstancia, se repuso de la paliza del primer set y controló la segunda manga. Apoyado por la colocación de Eduardo Sánchez y los ataques de Durigati, los vigueses cambiaron las tornas del partido llevándose el set 17-25.

Polémico tercer set

La igualdad se asentó entonces en el encuentro. Los remates de Lluis De Senespleda y Ángel Galindo eran respondidos por los de Pablo Gómez y Fabio Durigati en el campo rival, por lo que el marcador se mantuvo parejo (8-5, 16-14). Sin embargo, el trabajo en bloqueo de los pupilos de Pedro Lanero y una polémica jugada en las que los vigueses reclamaron toque de red de sus rivales y una posterior sanción por protesta posibilitaron a los catalanes hacerse con una ventaja de tres puntos hacia el final de set, que les permitió apuntarse la manga 25-22.

Como ocurriese en la segunda manga, el FC Barcelona se desfondó a causa de sus propias imprecisiones, por lo que el conjunto vigués no tuvo problemas para ganar el set (25-17) y poner el partido en el tie-break.

El intercambio de puntos se perpetuó en el electrónico en el quinto set, merced a que ambos equipos mantuvieron sus fallos al mínimo y jugaron muy bien el cambio de saque (8-7). Un parcial de 3-0 a favor de los catalanes, propiciado por los nervios vigueses otorgó ventaja a los de Lanero en el set. La genial dirección de Cosme Prenafeta hizo el resto y los blaugrana mantuvieron la diferencia hasta el resultado final de 15-11 y la victoria al FC Barcelona, que de esta forma se proclamaba campeón de la primera edición de la Copa Príncipe de Asturias.