Autoengaño

Esos molestos y peligrosos cohetes que tan de moda están estos días navideños es seguro que no los tiran xerecistas porque las cosas no están para demostraciones de alegría. Ya dije algo en mi anterior articulo cómo salí de la pasada Junta de accionistas del Xerez que no fue decepcionado por los números, que ya conocía, sino por la interpretación que quisieron darnos y los comparativos amañados a intereses personales que se nos intentó hacer tragar. El pasado jueves en entrevista a este mismo medio el presidente declaraba que «las cuentas del Xerez son las que son y están muy claras». Y tan claras y por eso debería reflexionar si entre a los que se pretendió engañar estaba él mismo cuando admitió que de junio a octubre se había rebajado la deuda en 2.830.000.- euros en la verdad más condicionada que se haya empleado jamás en Junta de accionistas de sociedad alguna. Supongo que luego habrá pedido las previsiones de pago de noviembre hasta junio y las de ingresos en el mismo período. Y debe haberlo hecho porque en la misma entrevista antes citada dice que «si no llegan los empresarios será complicado acabar la campaña». Prefiero que se sea consciente de la realidad de la situación aunque se intente ocultar de tan burda manera, a que se crean lo que nos contaron y se auto engañen con las funestas consecuencias que ello traerá. Se dice que ahora lo importante es lo deportivo y estoy de acuerdo siempre que no se añada «los números y lo económico no me importan o me dan igual». No entiendo el xerecísmo parcelado de, esto me preocupa pero aquello no, si el equipo gana no me importa lo demás, etc es que en realidad mi sentimiento azul me dice que lo que de verdad me preocupa es el Xerez en su totalidad y si ahora tiene abiertas dos heridas cuales son la deportiva y la económica, me preocupan ambas con una aclaración; de fútbol entiendo poco, de cuentas poco más, pero veo lo que veo. Feliz año nuevo.