El Parlamento de Nepal reforma la Constitución para abolir la monarquía
El país asiático se convertirá en una república federal democrática tras las elecciones de abril
Actualizado: GuardarEl rey Gyanendra tiene cuatro meses para hacer las maletas. Ayer, el Parlamento provisional de Nepal representó en una votación el acuerdo al que llegaron el pasado domingo el Gobierno y el Partido Maoísta, según el cual el país pasará a ser una república federal democrática tras las elecciones generales que deben celebrarse el 13 de abril. Sólo tres pequeños grupos se mostraron contrarios a la enmienda de los artículos 33 y 159 de la Constitución, muestra del escaso apoyo con el que cuenta el monarca, al que muchos ya le auguran el exilio. «Gyanendra tendrá que marcharse para conservar su integridad», reconoce Narayan Wagle, editor jefe del diario Kantipur Daily.
Los parlamentarios nepalíes también acordaron la composición de la Asamblea Constituyente que se encargará de llevar a cabo los cambios políticos del país tras las elecciones, y que deberá ratificar la decisión de mudar el sistema del Estado. La cámara contará con un total de 601 asambleístas, de los cuales 240 serán elegidos directamente, 335 más serán nombrados por un sistema de proporcionalidad directa a partir de las listas presentadas por los partidos políticos, una de las exigencias de las minorías étnicas que luchan por una mayor autonomía , y 26 podrán ser elegidos por el propio Gobierno.
Las decisiones tomadas ayer ponen fin a más de dos siglos de monarquía, pero no dan respuesta al papel que jugará el depuesto Gyanendra, que todavía cuenta con cierto apoyo dentro del Ejército. «Hay inquietud por las decisiones que puedan tomar los elementos más extremistas, leales al rey. Pero no creo que tengan fuerza suficiente como para cambiar el curso del país, que se ha volcado contra él», vaticina Wagle.
La esperanza se abre paso en Nepal, y todos los medios de comunicación del país coinciden en el pronóstico de una paz cercana. Según el acuerdo de ayer, una comisión independiente supervisará la labor del Gobierno provisional y el desarrollo de los acuerdos de paz, sobre todo el desarme de la guerrilla maoísta y su integración en las Fuerzas Armadas regulares.