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David Meca planea cruzar el Estrecho tres veces seguidas para batir el récord mundial de distancia
El nadador se enfrentará al reto el próximo 3 de enero, entre olas de hasta cinco metros y aguas a 12 y 13 grados
Actualizado: GuardarSus padres le insisten en que debe olvidarse de las hazañas, colgar de una vez el bañador y disfrutar de la vida. Le han pedido que no lo intente. El presidente de la Asociación Cruce a Nado del Estrecho de Gibraltar, Rafael Gutiérrez, le ha asegurado que es «imposible» que cumpla el nuevo reto que pretende realizar. Sin embargo, David Meca está convencido de que el 3 de enero, con unas condiciones «horrorosas», entre olas de cuatro a cinco metros, medusas, tiburones, vientos de 70km/h y aguas con temperaturas de 12 a 13 grados, será capaz de cruzar el Estrecho tres veces, sin descanso, entre Tarifa y Ceuta.
Meca calcula que podrá cubrir los 60 kilómetros (20 por cada cruce) que le esperan de aventura en 12 horas, y anuncia que en el caso de que durante su aventura se encuentre con algún cayuco animará a los inmigrantes en su travesía por el Estrecho. «Algún marroquí que me ha reconocido por la calle me ha llegado a decir que si supiera nadar como yo se traería aquí a toda su familia», desveló ayer el campeón del mundo de larga distancia, que dos días después del Año Nuevo, con 33 años, afrontará su octavo gran reto personal. Desea conseguirlo no sólo para sentirse realizado, sino para reivindicar su deporte y dar a conocer la natación, ya que lamenta que en España «sólo existe el fútbol, Fernando Alonso y el tenis de vez en cuando».
A pesar de que en enero de 2006 llegó al puerto de Ibiza desfallecido, con hipotermia y síntomas de congelación en su hombro izquierdo tras cubrir en sólo 22 horas y media la Península y Baleares, y debió pasar dos días ingresado en el hospital, Meca desea marcar otro hito. Aquellas heridas y dolores los tiene muy olvidados. En caso de tener éxito, ya tiene pensada su dedicatoria. «Con más cariño que nunca, a mis padres, que no quieren que haga el cruce y me piden que me retire. A Rafael Gutiérrez también le da miedo. Al menos una veintena de nadadores lo intentan al año, y yo sé que es muy complicado, pero estamos en un gran momento de forma», asegura el deportista de Sabadell.
Duro entrenamiento
«Montaremos en esa montaña rusa del Estrecho», sentencia Meca, a quien le preocupan, sobre todo, las duras condiciones climatológicas que le esperan. «Traed los chubasqueros», repite a quien vaya a seguir su trayecto, con muchas horas de oscuridad, desde alguna embarcación. «Habrá vendaval o temporal, con olas de al menos cuatro metros y fuerza 8», insiste. Víctima de una gripe por nadar en aguas frías, todavía está «un poco constipado», pero espera que en menos de una semana esté recuperado para esta cita para la que lleva entrenando desde hace alrededor de cuatro meses.
«Este reto me llena, y el calor de la gente hace que me levante cada día a las cinco de la mañana para ir a entrenar y conseguirlo», concluye.