Fallece electrocutado un joven de 22 años al subir a una torre de alta tensión
El accidente ocurrió por una imprudencia en la noche del pasado miércoles en un camino peatonal de las inmediaciones del centro comercial Bahía Sur
Actualizado:Un joven de 22 años murió el miércoles por la noche en el hospital Puerta del Mar después de haber sufrido una fuerte descarga eléctrica mientras intentaba subir a un poste de alta tensión. El accidente, causado por una imprudencia de la víctima, sucedió en el camino peatonal que comunica Cádiz con las proximidades del centro comercial Bahía Sur.
La víctima se llamaba Adrián Guerrero Castañeda y era vecino del barrio Al-Andalus. A pesar de su rápido traslado al hospital Puerta del Mar, el equipo médico no pudo hacer nada para reanimar al joven, que ingresó en el centro con una parada cardiorespiratoria irreversible. Además de los daños provocados por la descarga, el cuerpo del difunto también presentaba un corte en la mano derecha y diversas contusiones en la espalda ocasionados por la caída.
En el momento del accidente, la víctima se encontraba en compañía de su novia y de, al menos, una amiga común, que pudieron relatar a la Policía Nacional, que fue alertada por los servicios sanitarios, las circunstancias del fallecimiento.
La noticia de la muerte de Adrián Guerrero ha truncado las fiestas navideñas a sus familiares y amigos, que durante el día de ayer acudieron al tanatorio del polígono industrial de Fadricas para velar al finado.
Padre de un niño
La víctima era padre de un niños de dos años y trabajaba en un taller especializado en la reparación de embarcaciones, que está situado en el polígono industrial de Tres Caminos. El joven tenía dos hermanos y una hermana, que ayer lloraban su trágico final.
Tras el responso, que está previsto que se celebre esta mañana a las 11 horas en la iglesia de La Ardila, los restos mortales serán enterrados en el cementerio municipal de San Fernando.
Antonio, uno de los compañeros de trabajo del fallecido, recordó ayer con gran cariño al difunto durante su visita al tanatorio isleño. «Era un buen profesional y un compañero excelente. Llevaba trabajando con nosotros cuatro años y siempre se mostró alegre y dispuesto a hacer favores a los demás».
Sus compañeros
Por otro lado, este compañero del finado confesó que la noticia del accidente dejó perplejo a todos los miembros del taller donde estaba empleado Adrián. «Nosotros nos enteramos del triste suceso ayer a primera hora de la mañana, en torno a las seis, y no podíamos creer lo que estábamos escuchando. Sin ir más lejos, durante buena parte del día nos negamos a aceptar la dura realidad».
El compañero de Adrián Guerrero también recordó emocionado uno de los últimos momentos felices que vivió con el fallecido. «El pasado viernes los compañeros de la nave celebramos la cena de empresa y él volvió a hacer gala de su simpatía y de su vida sana, ya que ni bebía alcohol ni fumaba».
sanfernando@lavozdigital.es