Comienza el juicio en Chad contra los seis franceses de la ONG 'Arca de Zoé'
Los procesados fueron detenidos cuando se disponían a abandonar el país con 103 niños que supuestamente hicieron pasar por huérfanos con la excusa de ponerlos en adopción
YAMENA Actualizado: GuardarEl juicio contra seis franceses de la organización no gubernamental 'Arca de Zoé' acusados de intento de sacar ilegalmente de Chad a más de 100 niños comienza hoy en un tribunal de Yamena.
En los alrededores del Palacio de la Justicia de la capital chadiana ha sido desplegado esta mañana un fuerte dispositivo de seguridad como medida de prevención ante posibles incidentes, ya que se prevé que un elevado número de personas acuda para seguir el inicio del proceso.
Los seis franceses procesados trabajan para la mencionada ONG y fueron detenidos en Abeché, localidad fronteriza con Sudán, cuando se disponían a abandonar el país con 103 niños que supuestamente hicieron pasar por huérfanos con la excusa de ponerlos en adopción.
Las autoridades chadianas paralizaron la operación y detuvieron a un total de 16 europeos, incluidos 7 españoles miembros de la tripulación del avión que había fletado la ONG y que debía trasladarlos a Francia.
Pero a excepción de los 6 franceses acusados directamente del caso, todos los otros han sido puestos en libertad en diferentes momentos, la mayoría de ellos con la mediación del presidente francés, Nicolás Sarkozy, que viajó hasta Yamena.
Podrían cumplir su condena en Francia
Entre los seis detenidos se encuentra el jefe del Arca de Zoé y ex bombero, Eric Breteau, quien antes de comenzar el juicio ha asegurado que hay un acuerdo para que sean condenados y luego repatriados a Francia para cumplir su condena.
Por su parte, el Elíseo ha rehusado confirmar dicha información. "La justicia sigue su curso. Todavía no se ha pronunciado. Estamos a la espera del veredicto de la justicia chadiana", ha manifestado el portavoz del presidente francés, David Martinon.
Preguntado al respecto, Martinon, ha recordado que hay un convenio de cooperación judicial entre los dos países, que se remonta a 1976 y que prevé que "si las autoridades de Chad lo piden" y si los interesados, en caso de ser condenados, lo desean, podrían cumplir su pena en Francia.