La Gerencia de Urbanismo aprobará en el primer trimestre el Plan del Casco Histórico

La delegada general de Urbanismo, Carmen Pedemonte (PP), anunció ayer que la aprobación definitiva del Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Casco Histórico (Peprich) irá a Pleno a principios de año, al igual que la aprobación provisional del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), dos instrumentos considerados «claves para el desarrollo de la ciudad».

En relación al primero de los documentos urbanísticos, lo que hasta el momento se desconoce es si la aprobación del Peprich tendrá lugar sin la existencia de la reforma del catálogo de viviendas protegidas, algo en lo que desde Urbanismo se viene trabajando de forma conjunta con el Colegio de Arquitectos en base a un convenio. De ser así, el equipo de Gobierno local tendrá que enfrentarse al descontento de los vecinos, que tras el informe de la Consejería de Obras Públicas, a través del que se aceptaba las alturas de los inmuebles, hicieron pública la exigencia de un nuevo catálogo en que se eliminaran los «innumerables fallos» del anterior.

Futuras actuaciones

Pedemonte ha manifestado en más de una ocasión que lo que se pretende es que el catálogo «ni nos amarre ni nos condicione» de cara a que aquellas franquicias que quieran desarrollar su actividad en inmuebles que no se encuentren afectados no vean frenadas sus pretensiones por encontrarse sujetas a la revisión del catálogo.

Del mismo modo, Pedemonte se mostró ayer satisfecha de que la aprobación del Peprich servirá también para llevar a cabo otra serie de actuaciones, como la rehabilitación de la Casa Lazaga.

Hay que tener en cuenta que la intención del PP antes de las elecciones municipales era la de convertir este inmueble en un «hotel con encanto», algo que tendrá que consensuar con sus socios de Gobierno.

Encuentro con afectados

El delegado de planeamiento, Pascual Junquera (PP), ha mantenido esta semana una reunión con representantes de la asociación Casco Histórico en que estuvo presente Pedemonte, quien sostiene que se trata de «un tema delicado y complejo en el que son muchos los aspectos a tener en cuenta».

La delegada de Urbanismo se ha mostrado dispuesta a resolver las dudas de todos los afectados con el objetivo de sacar adelante un documento que sea «lo más beneficioso posible para todos», puesto que dice no tener ningún interés particular en perjudicar a ningún vecino.

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