Europa mediterránea
La reunión que mantuvieron ayer en Roma el presidente Rodríguez Zapatero, Nicolas Sarkozy y Romano Prodi sirvió para devolver el proyecto de la Unión Euromediterránea al seno de la UE. La idea de estrechar los lazos entre los países ribereños del Mediterráneo, creando un proceso de cooperación y diálogo más sólido y profundo que el que existe hoy en día, obedece a una preocupación común derivada de la creciente concurrencia de desafíos y oportunidades en el área. El problema estribaba en que el presidente francés se proponía lanzar esta iniciativa, con creación de instituciones nuevas incluidas, sin el concurso de los 27 socios europeos y al margen de la UE, circunscribiendo el proyecto únicamente a los países comunitarios que tengan salida al Mediterráneo.
Actualizado:Tal opción, contraria de hecho a la trayectoria diplomática francesa, hubiese afectado muy seriamente a las relaciones exteriores de la UE que desde 1995 ha potenciado, a través del llamado «Proceso de Barcelona», el diálogo y la cooperación mediterráneas. Alemania en especial se había sentido injustamente postergada por el presidente francés, llegando la canciller Angela Merkel a expresar en público su desacuerdo con las intenciones de Sarkozy. Los argumentos alemanes eran en este punto coincidentes con los de los gobiernos español e italiano: lo que ocurra en el Mediterráneo afecta a todos los europeos y la política mediterránea tiene que ser coherente con el resto de las actuaciones europeas, siendo necesario que se realice desde el marco institucional de la Unión.
Además, Alemania ha financiado generosamente durante muchos años los programas mediterráneos de la UE y rechaza la idea de áreas de influencia por proximidad en la proyección exterior europea. Un razonamiento que se apoya en los avances hacia una política exterior común del recién adoptado Tratado de Lisboa. Más allá de los resultados del encuentro de ayer, España, que fue la gran impulsora de la cooperación euromediterránea en los años noventa, tiene ante sí la responsabilidad de servir de puente para lograr una solución netamente europea e integradora como su gran objetivo para la presidencia de la UE en 2010.