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Lage o Pérez Roque y la larga mano de Fidel

¿Existen discrepancias entre Fidel Castro y el Gobierno que encabeza provisionalmente su hermano Raúl?. Un funcionario comentaba que eso nunca sucederá, que como mucho podrían darse diferencia de opiniones entre hermanos. Sin embargo, la semana pasada ocurrió algo que sorprendió a muchos observadores. El canciller Pérez Roque anunció la firma «en los próximos meses» del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y el de Derechos Civiles y Políticos y que en marzo de 2009 se sometería a la revisión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.

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El anuncio era importante pero llamó la atención que tres días después, Fidel pidiera que se recordaran los motivos aducidos hace siete años para no firmar dichos pactos. Estaba en contra de los sindicatos libres y la enseñanza privada. Para algunos opositores, acusados por Cuba de trabajar a sueldo de EE UU, era una manera de ganar tiempo. Para otros, como el moderado Manuel Cuesta Morua, Fidel «está con el ojo avizor, poniendo cortapisas» pero el «gobierno real está ya en otra parte y sabe que tiene que dar pasos».

El discurso de Raúl del 26 de julio cuando reconoció que los salarios son insuficientes y pidió a todos expresar todas las quejas, marcó un punto de inflexión en los 17 meses de gobierno raulista. Su petición provocó un intenso debate en la sociedad donde especialmente las quejas. Muchos cubanos se han soltado la lengua para decir abiertamente lo que piensan: que el transporte es un dolor de cabeza, que desde que legalizaron el dólar en 1994 sólo viven bien quienes tienen acceso a él, que hay muchas dificultades para alimentarse bien, y que la doble moneda penaliza al más pobre. El ascenso de Raúl, hombre con fama de pragmático y preocupado por la familia y las cosas cotidianas, alentó la esperanza de un cambio económico que permitiera levantar cabeza. Cual sea la fórmula elegida para el futuro no parece preocuparles demasiado. Fidel podría ser reelegido como presidente honorífico pero con influencia real y activa sobre quienes ejerzan el gobierno. Dos jóvenes destacan para la jefatura del Ejecutivo, el vicepresidente Carlos Lage, 56 años, y el ministro de Exteriores, Felipe Pérez Roque. Mientras que Raúl Castro podría quedar como presidente del PCC y jefe de las Fuerzas Armadas.