Sarkozy, gran triunfador de la cumbre de donantes, recibe a Condoleezza y a Mahmud Abbas. / AFP
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La comunidad internacional financia el camino de la ANP hacia el Estado palestino

La Conferencia de Donantes de París supera las previsiones y reúne más de cinco mil millones de euros para sustentar el Gobierno de Abbas La aportación permite a Ramala afrontar reformas y frenar la corrupción

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La comunidad internacional ha reunido con ocasión de la Conferencia de Donantes celebrada ayer en París aportaciones por importe de 5.100 millones de euros para financiar el plan de reformas de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en el próximo trienio, de los cuales 2.300 millones irán destinados al presupuesto de 2008. La suma total supera con holgura los 3.900 millones que el Gobierno de Ramala esperaba recaudar para sacar a flote su economía y llevar a cabo un programa de reformas que permita frenar la corrupción.

En la rueda de prensa de clausura, el ministro francés de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner, saludó el «éxito» de la reunión que presidió y, tras agradecer la generosidad de los donantes, puntualizó sin dar nombres que «no han sido todos los países más ricos quienes han hecho los mayores esfuerzos». Por su parte, el primer ministro palestino, Salam Fayad, destacó que la importante ayuda llega en un momento oportuno para «avanzar en el proceso» de paz, «poner fin a la ocupación» israelí y sentar las bases del futuro Estado.

«La última esperanza»

La Unión Europea, principal contribuyente de ayuda a los palestinos, anunció el desbloqueo de 450 millones de euros para 2008. Francia, anfitrión de la conferencia, Alemania y Suecia aportarán 210 millones cada uno. Reino Unido contribuirá con 341 millones y España lo hará con 167, según anunció el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos. Arabia Saudí debe suministrar 350 millones y Estados Unidos se comprometió a entregar 380, una cifra calificada de «histórica» por su secretaria de Estado, Condoleezza Rice.

«Esta conferencia es literalmente la última esperanza del Gobierno palestino para salvarse de la quiebra», enfatizó la jefa de la diplomacia estadounidense ante las noventa delegaciones de países y organizaciones internacionales participantes. «Hace falta una ayuda financiera concreta. Los palestinos han esperado durante demasiado tiempo la hora de su dignidad», insistió.

Rice subrayó que en los últimos siete años no se había presentado una ocasión tan favorable de relanzar el proceso de paz como la surgida en la ciudad norteamericana de Anápolis. En esa cita, celebrada a finales de noviembre, israelíes y palestinos se comprometieron a obrar con miras a la creación de un Estado palestino a finales de 2008.

«Sean generosos, sean audaces», había clamado Nicolas Sarkozy, en el discurso inaugural. «Ofrezcan a los pueblos de Israel y Palestina el más hermoso de los regalos», añadió el presidente francés, quien insistió en que «la dinámica de paz se ha relanzado». «No debe, no puede fracasar. Nosotros, la comunidad internacional, debemos apoyarla con todas nuestras fuerzas», arengó.

Por su parte, el presidente de la ANP, Mahmud Abbas (Abu Mazen), dramatizó la situación al advertir a los donantes que «sin las ayudas en metálico que permitan al Tesoro palestino cumplir su papel, estaremos confrontados a una catástrofe total en Cisjordania y en la banda de Gaza». Además reclamó el cese de «todas las actividades de colonización sin excepción» por parte del Estado hebreo en los territorios palestinos.

En respuesta, el ministro israelí de Asuntos Exteriores, Tzipi Livni, vinculó el desarrollo de los territorios palestinos con la seguridad de Israel. «Para llegar a la paz la seguridad debe ser un interés palestino, lo mismo que un Estado palestino es un interés israelí», sentenció.