El burlador burlado
El 'playboy' que anunció que legaría 250.000 euros a la mujer que lo «matara haciendo el amor», ha sido abandonado por su prometida
Actualizado: GuardarRolf Eden, histórico playboy de Berlín, ha recibido la bofetada que muchas de sus conquistas desearon y no pudieron darle a este don Juan de 77 años, que presume de estar todavía en activo: le han dejado plantado a sólo cuatro días de la que iba a ser su primera boda. La única mujer que llegó a conquistar el corazón de este incombustible seductor y juerguista, una joven de 27 años, ha decido dejarle, pues, según informó ayer Eden a medios locales, «la joven dama se ha dado cuenta ahora de que quiere formar una familia, lo que conmigo, obviamente, no podrá ser». El playboy, invitado obligado en las fiestas de toda Europa que quieren presumir de glamour, confesó que está con la boca abierta y que nunca imaginó que algo así pudiera sucederle a él.
Eden se había hecho famoso tras haber resuelto donar la sustantiva suma de 250.000 euros a la mujer que fuera capaz de hacerle feliz en la cama y de causarle la muerte por un placer infinito. El excéntrico millonario sólo puso una condición: su fallecimiento debía sobrevenir en medio del éxtasis del acto sexual. «Deseo morir en los brazos de una mujer hermosa», dijo cuando dio a conocer, urbi et orbi, el nuevo párrafo de su última voluntad. «Deseo morir después de tener un orgasmo glorioso», añadió.
El playboy alemán, que hace honor a su apelativo, no es tan famoso ni tiene el glamour que tenía Gunter Sachs en su época, cuando toda la Costa Azul, incluida Brigitte Bardot, se rendía a sus pies
«Casi me caigo de la silla», fue la reacción Eden al escuchar de los labios de su prometida, cuatro antes días de la boda y con todas las invitaciones enviadas, «no me caso».
Pero Eden , aunque «triste», es un caballero y entiende a la chica, con la que mantiene una relación de casi cuatro años, salpicada por constantes sospechas y rumores de infidelidad por su parte. «Es normal que una mujer joven se plantee tener hijos, un tema que para mí está zanjado, pues, como todo el mundo sabe, tengo siete de distintas relaciones», agregó.
Dos preocupaciones
«Sólo tengo que resolver dos preocupaciones cada día: qué automóvil voy a conducir y con qué mujer voy a dormir. Jamás he estado enfermo, nunca he practicado un deporte y todos los ejercicios que necesita mi cuerpo los hago cuando estoy con una mujer», suele repetir.
Eden, sin embargo, no tirará la toalla y, en cuanto se reponga del chasco, le pedirá otra vez matrimonio durante el viaje que ambos emprenderán a Miami (EE UU) la semana próxima, unas vacaciones planificadas como luna de miel con tintes ahora de premio de consolación. «No la puedo perder. Birgitte es tan guapa, tan joven, tan dulce y tan inteligente que ha de ser mía. Ella es el gran amor de mi vida», sentenció el playboy.