Cumplimiento en los centros de trabajo

a imagen del clásico oficinista con el pitillo colgando perennemente de los labios y con una voluta de humo a su alrededor ha desaparecido de los centros de trabajo. Todos los estamentos coinciden en que el cumplimiento de la normativa en los lugares de trabajo es satisfactorio, si bien da lugar a algunas paradojas. Los empleos que se desarrollan al aire libre no se tratan por igual, así que albañiles o jardineros, por poner sólo dos ejemplos, siguen permitiéndose fumar mientras trabajan. Y se da el caso curioso de los camareros que deben salir fuera del bar aunque en su interior los clientes puedan fumar, ellos están trabajando.