Un desperdicio

asta, trabajo y buen hacer han sido los ingredientes de un buen producto arcense que está apunto de dar sus frutos . fuera del Xerez. Dani Zúñiga, un jugador que en las pocas oportunidades que ha tenido unió a la grada en una de las pocas reflexiones que han conseguido consenso en Chapín. El veredicto fácil y sin protesta de la acusación. Zúñiga ha demostrado que puede ser ese revulsivo que necesita el equipo. Moreno, Luque, Samuel y Abel Aguilar han sido los componentes de un cóctel de esos que se sirven en un hotel de Torremolinos. Sin sal, sin fuerza y muy caros. Ellos han compuesto en varias combinaciones la medular sin éxito. El centro del campo no existe, no carbura, no rinde. Moreno es el único que cumple. Le sigue Abel Aguilar que por lo menos no se esconde. Abel pide, busca y cerca la pelota en pos de su recuperación, además tiene peligro cuando llega a la frontal. Luque se oculta, se pega al contrario y se borra. No se puede tener a un futbolista para diez minutos y tirar las faltas. Samuel, por su parte, ralentiza el juego, no dispara, no roba, no hace nada. Después de la parrafada, muchos de ustedes me mandarán a la venta o muchos me darán la razón. Faltan combinaciones. ¿Por qué no sigue combinando Casuco? El técnico tiene mas donde elegir. Moreno y Abel Aguilar pueden ser adheridos a Zúñiga buscando una nueva aportación a los únicos pivotes que han aportado algo en este tramo de Liga. Lo de Benjamín es complejo, pero podría también entrar. Si funciona la plaza de toros central y se ajusta la defensa estoy seguro que esto funciona. Pero si Casuco se empeña en no seguir rotando una posición con muchas posibilidades, seguramente veamos a Dani Zúñiga jugando en el Portuense o en el Écija. Un autentico desperdicio para alguien que se merece la oportunidad ante el Castellón y el Eibar. Si no vale que lo manden al grupo cuarto. Pero hay que ponerlo junto al capi o al colombiano. Es el revulsivo y el que no lo vea, que venda cupones en la puerta de la plaza.