Apriete usted el botón

raquistain, Pachín, De Felipe, Sanchís, Pirri, Zoco, Serena, Amancio, Grosso, Velázquez y Gento... peaso foto; los de pie colocados, por puesto, y los agachados, además, en perfecto estado de cuclillas (y Grosso con el balón entre las manos). Ahora es un galimatías, cada uno se coloca donde le da la gana, Yago no se sabe si llega o sale de la formación, las cuclillas de Casas no alcanzan a reverencia zarzuelera, Pavoni se está atusando el pelo y Enrique parece que está soltando aire... Eso sí (como ya nadie coge el balón) lo que no falta es el tablón con la publicidad... da coraje. Le digo, aunque desde Araquistain hasta el final se va a encontrar palabras, soy un intruso en el docto mundo de las letras, lo mío es la imagen, el plano corto, el cenital, el contraplano... Y no por ello menos creído, que quienes hemos tenido el laboratorio en el cuarto de baño y descubierto la gama de matices que va del negro al blanco, con cada una de las fotografías nos hemos sentido Nicéforo Niepce. Cada foto es la revelación, un instante único, mágico... Cómo será que los indios creían que el fotógrafo les robaba el alma y se adueñaba de ella, por eso se cargaron a Boggiani. Menos mal que después Eastman fabricó la cámara y el eslogan «Apriete usted el botón, nosotros hacemos lo demás», y ya nadie se carga a nadie por salir en la foto. Al contrario, que decía esta semana Román que a la alcaldesa le gustan las confrontaciones, pero lo que le gusta de verdad son las fotos... Ya veremos la del lunes, porque Zetapé y Rubalcaba son fijos de pie, pero Román puede salir como Yago o Casas (...bueno, o como Pavoni) y la alcaldesa (me pega) como Enrique... Lo que está claro es que ninguno va a coger la espiocha entre las manos, así que a ver cómo arreglan lo de la publicidad (eso sí que es un galimatías: apriete usted el botón, nosotros ponemos el tablón).