«Quiero que tú vivas, mamita»
Ingrid Betancourt, la rehén francocolombiana secuestrada en 2002 por las FARC, sólo pidió en la desgarradora carta dirigida a su madre, Yolanda Pulecio, que sus hijos le enviaran tres mensajes semanales porque era «la única información vital, trascendental e imprescindible. Lo demás ya no me importa».
Actualizado:Ayer, gracias a la emisora Radio Francia Internacional, que ajustó sus antenas para que pueda ser captada con mayor calidad en Colombia, se transmitió el primero de una serie que emitirá lunes, miércoles y viernes.
«Ánimo, mamita linda, porque vas a regresar a la casa», le dice Mélanie. «Mi mamita linda de mi corazón, te quiero decir, ante todo, que te amo de toda mi alma», se escucha decir a Lorenzo, quien también le pide: «Yo quiero que tú vivas».
La muchacha, de 20 años, estudia en Nueva York. «Estoy a tu lado continuamente mami, tú estás conmigo en todo lo que hago», dijo antes de hablar de cosas cotidianas, como los estudios. Lorenzo suplicó: «Mamá, tú me quieres ver vivir, yo quiero que vivas, yo quiero que comas lo mejor posible y que tengas el deseo de vivir».
Más tarde, Mélanie, emocionada, añadió: «Mami, ánimo, ánimo por favor mamita linda. Tienes que cuidarte, eso es lo más importante para mí: que te mantengas fuerte».