Otro triple infanticidio conmociona al país germano
Por desgracia, el drama de Darry no ha sido un caso aislado. En Plauen, un pueblo del estado de Sajonia, sus habitantes experimentaban ayer una sensación de estupor parecida a la de la localidad situada a unos 650 kilómetros, después de conocer que una mujer amable y atractiva había asesinado a sus tres hijas inmediatamente después de parirlas.
Actualizado:La madre de las niñas, que nacieron en febrero de 2002, enero de 2004 y septiembre de 2005, se había mudado nueve veces en los últimos meses y en cada cambio de residencia trasladaba los cadáveres de sus hijas. La Policía encontró uno de los cuerpos en el congelador, otro en el interior de una maleta y el tercero en el balcón de la vivienda.
Los infanticidios de Darry y Plauen se añaden al ocurrido en julio de 2005, cuando la Policía descubrió por casualidad, en la localidad de Brieskow-Finkenherd, el caso de una mujer que había dejado morir, a medida que iban naciendo, a nueve de sus hijos. Los cadáveres los escondió en macetas.
Y entre 1984 y 1988, un matrimonio de Wernigorede, en el estado de Sajonia-Anhalt, asesinó a sus cinco hijos recién traídos al mundo y los quemó en la caldera de la calefacción.